B.P.

"El miércoles hablaremos del nuevo proyecto de la UD Las Palmas. Si estoy al frente del club, llevaremos al equipo a la Primera División. Es el momento de dar un paso al frente. No podemos afrontar una temporada con ocho o diez mil abonados. No podemos; cada vez está más difícil para hacer una plantilla ilusionante", dijo Miguel Ángel Ramírez, presidente de UD Las Palmas en declaraciones de este lunes a UDRadio. "He llorado mucho, con todos los aficionados de nuestro jugadores. Pero nos levantaremos. Yo voy a seguir empeñado a llevar a este equipo a Primera División y ayer casi lo logramos. Le demostraremos al mundo que la UD Las Palmas no tiene nada que ver con los que saltaron ayer al terreno de juego".

"Si ha sucedido esto es para que todos nos unamos más y aprendamos de nuestros errores", esgrimió. "Tenemos que aspirar a que todos estemos juntos, a nuestra comunión y complicidad. Tenemos que ser un equipo y afición grande". Indicó que "no le tenemos miedo a ningún reto. Más complicado que proyecto con un déficit de 72 millones de euros no lo hay. Tiraremos para adelante y agudizaremos el ingenio. Necesitamos a la afición. Tenemos que salir con más fuerza todavía para afrontar la próxima temporada. No nos podemos venir abajo".

En esa rueda de prensa del miércoles el titular del consejo de administración avanzará los primeros detalles de la campaña 2014-15 en la que Ramírez confirma convencido de que se confeccionará una nueva plantilla con la que "lucharemos por el ascenso". El presidente se rehace del duro contratiempo vivido en el Estadio frente al Córdoba, matizando en primer tiempo lo ocurrido con el asunto de la invasión de los exaltados: "Mi profesión es la seguridad. Nosotros somos auxiliares a las fuerzas de seguridad que acuden al Estadio. La junta de seguridad de los partidos tiene un máximo responsable, que es miembro de la policía", aclaró. "Las decisiones se toman en una reunión. Llevo como presidente 9 años pero llevo la seguridad de UD Las Palmas desde el año 98. Hubo invasiones de campo en 2000 y 2006 y no pasó nada. El problema radica en que ayer la UD Las Palmas no ascendió, a diferencia de los dos anteriores".

Aclaración de los hechos

"El partido se reanudó ayer porque estaba controlada la situación después del inicio de avalancha. Con los mismos efectivos que en 2000 y con mejores instalaciones que en el Insular, que eran más precarias, tuvimos mayores problemas", dijo. "En la junta de seguridad se nos pidió 80 vigilantes, pero yo pedí que pondríamos 100 vigilantes. Como medida alternativa pedimos en megafonía que no se saltara al terreno de juego a través de un comunicado. Teníamos claro que podría haber una invasión. No procedía que los miembros de seguridad sacaran la porra a dar a diestro y siniestro. La medida inicial era proteger a jugadores y árbitro como se hizo ante el Linares".

Valerón, con la mirada perdida, después del partido frente Córdoba (C. Torres)

"Toda la vida el Estadio ha abierto sus puertas diez o quince minutos antes del final. Eso lo saben nuestros aficionados. Se tomó otra medida esta vez: no abrir las puertas hasta tres o cuatro minutos antes del final del partido. Se abrieron las puertas del Estadio faltando cuatro minutos, cuando se nos dijo lo que teníamos que hacer (...) Se abren las puertas por motivos de seguridad", aclaró tras poner ejemplos de avalanchas que tuvieron resultados algunas muertes. "Lo importante en una junta de seguridad no es lo deportivo, sino velar por la propia seguridad de las personas que acudan al espectáculo. Es nuestra responsabilidad como empresa (Seguridad Integral Canaria) y también para las fuerzas de seguridad. Y eso se ha cumplido. No teníamos constancia ni competencias de lo que sucedía alrededor del Estadio. Si los responsable de la seguridad nos hubiesen advertido (de esas circunstancias) no se hubiesen abierto las puertas. Nadie podía imaginar que fuera del Estadio habían personas dispuestas a perjudicar lo que otras estaban disfrutando: el ascenso a Primera División".

Reconoció que, en aquel momento en que Sánchez Martínez paró el encuentro, "mi miedo era que el árbitro suspendiera el partido de forma definitiva. Porque si es así, a la UD le dan por perdedora. Mi prioridad era tranquilizar al árbitro. Se lo pedí a mi gente para centrar el esfuerzo en el foco de la grada Sur. El árbitro se tranquilizó y reanudó el partido", añadió. "Nadie esperaba que una jugada del Córdoba, que llega por primera vez hasta Barbosa, sucediera en el minuto 93" el gol del empate que daba el ascenso al conjunto andaluz.

Parón largo, descentrados los jugadores

"El parón fue muy largo, lo justo para descentrar a los jugadores de nuestro equipo. Estaban pidiendo a los aficionados que salieran del campo. Estuvimos a tres o cuatro segundos de volver a Primera División", manifestó antes de "pedir disculpas a los cuerpos de seguridad si por mis palabras se sintieron ofendidos. Lo digo como UD Las Palmas y como presidente de Seguridad Integral Canaria. No queremos buscar ningún culpable. Si aquí hay un culpable es la UD Las Palmas y en particular el presidente, Miguel Ángel Ramírez".

"Mi dimisión estaba preparada después del ascenso de la UD Las Palmas. Pero si no viene nadie a suplirme no voy a dimitir, porque no voy a abandonar a la UD Las Palmas en estas condiciones. Hemos trabajado muy duro para abarrotar el Estadio de Gran Canaria, pero esa complicidad que hemos visto ayer hasta el minuto 92 de partido es para enmarcar (...) Si no vienen (los miembros de un relevo) que nos apoyen y nos ayuden a trabajar para seguir adelante. No podemos permitir que Gran Canaria esté desolada como hoy", añadió. "Tenemos que aprender. Por supuesto tomaremos medidas dentro del club. Valorar cómo se abren las puertas. Queda levantar el ánimo de los aficiondos que están destrozados, de los jugadores que han dado la vida por este club. Ayer vieron que nuestros jugadores querían ascender. El equipo lo dio todo y hasta cuatro segundos del final estábamos en Primera División".

"Hubo de todo en las gradas: aficionados normales llevados por la euforia y auténticos golfos. Detrás de esta masa hay gente que no es digna de estar al lado de la UD Las Palmas o vestir una camiseta como la nuestra" reseñó enojado.