¡Cómo hemos cambiado!

25 años después, algunos de los protagonistas de aquella fase copera en Gran Canaria vuelven. Ruiz Lorente es el miembro del CAI campeón que ahora ocupa un banquillo. Y Aíto dirigía entonces al Barça

B.P.

25 años después la Copa del Rey de baloncesto nos trae a Gran Canaria algunos de aquellos protagonistas de febrero de 1990 en el Centro Insular de Deportes, con rostros y roles cambiados desde entonces. Fueron protagonistas, algunos de manera brillante para sus equipos. Por eso, en el palmarés del hoy técnico del CAI Zaragoza, Joaquín Ruiz Lorente, tiene un lugar muy alto el título que conquistó en tierra canaria, donde había dejado un buen sabor de boca como base en formación cedido entonces al Claret. Pero Joaquín fue partícipe activo de aquel título, haciendo los relevos del base titular Pepe Arcega, deleitándose en el triunfo sobre el Joventut de Badalona (76-69) en la gran final.

Ruiz Lorente vuelve a Gran Canaria a una Copa donde su hijo, Alex, es ayudante de la plantilla infantil del equipo maño que actúa en Las Canteras para el título de la Minicopa (imagen de la derecha, del CAI Zaragoza).

Al lado del primer entrenador hoy, como asistente del equipo maño, se encuentra Pep Cargol, entonces alero del Real Madrid, que fue una de las grandes decepciones al caer en semifinales frente al propio CAI. Ruiz Lorente y Cargol se midieron entonces (74-73 para los maños), hoy en cambio estarán juntos en el intento de que el CAI alcance su tercer día de gloria en la competición.

En estas vidas cruzadas después de un cuarto de siglo, no se olvida la actuación aquella memorable tarde del héreo del CAI, Mark Davis, cuyos 44 puntos doblegaron al Joventut, que se había instalado en la candidatura de favorito después de las caídas del Real Madrid y FC Barcelona. Davis amargó la tarde a su par verdinegro, Jordi Villacampa (22 puntos en la final), el hoy presidente del propio Joventut. De aquel equipo que dirigía Herb Brown, todavía sigue en la entidad como integrante de la directiva de Villacampa el pivot vasco Juanan Morales, en misiones dentro del área deportiva.

No sólo existen supervivientes en la final. Alberto Herreros es protagonista por sus responsabilidades actuales en el área de deportes del Real Madrid. Pero Herreros fue una de las grandes ausencias de aquella edición de 1990, al no clasificarse como jugador de un potente Estudiantes que lideraba el Oso Pinone.

Pablo Laso, en cambio, sí jugó las eliminatorias del Centro Insular de Deportes. El hoy entrenador del Real Madrid era el base estratega del Tau, que precisamente cedió testigo en ronda en los cuartos de final frente a los blancos (84-82).

Pero, ¿qué sería una historia de baloncesto en España sin Aíto García Reneses?. El entrenador del Gran Canaria era entonces máximo responsable técnico del FC Barcelona, tras su exitoso paso por el banquillo del Joventut. Cumpliría en 1990 su primer ciclo de cinco temporadas con los azulgrana. Y en la fase copera de Las Palmas, Aíto conoció con su equipo una decepción mayúscula porque el Barça fue la primera víctima de los resultados sorpresas del torneo. Cayó ante el Granollers a las primeras de cambio (85-83) en una colosal plantilla donde jugaban Epi, Jiménez, Costa, Solozábal, Audie Norris, Wood, Crespo ... En sus carnes vivió la rotura de los pronósticos entonces, ahora quiere hacer lo contrario con uno de los equipos que se estrenan como anfitrión en tan aleatorio evento.