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Opinión

  • UD: Un cocktail explosivo

    07-09-2014

    "Menos mal que este año nos divertimos". Así se expresaba uno de los aficionados a la salida del recinto deportivo de Siete Palmas. Y es que esta Unión Deportiva Las Palmas es otra, particularmente en cuanto a conceptos se refiere y sobre todo por la presión que ejercía sobre su rival hasta que el árbitro dio por finalizado el encuentro.

    La contundente victoria (3-0) fraguada en la segunda parte sobre el Lugo, fue fruto del trabajo realizado desde el comienzo del partido. El equipo canario fue a por su rival desde el pitido inicial, tenía claro que a su buen contrario había que neutralizarlo y no darle opciones, principalmente gracias a un poderío que desquiciaba a los hombres de Quique Setién, quienes dieron cera a diestro y siniestro para intentar contrarrestar la avalancha que se les venía encima.

    ¿Qué ha cambiado esta temporada?. Sin ir más lejos nos encontramos con un centro del campo como hacía tiempo que no se veía, arropado en todo momento por un incansable Javi Castellano. Además se cuenta con un verdadero "killer" del área, Araujo. Un cocktail explosivo que a buen seguro dejará buenos réditos a los hombres de Paco Herrera, quien en esta ocasión volvió a hacer una lectura acertada del partido, que le llevó a conseguir tres nuevos puntos. Pero el principal cambio lo notamos en la mentalidad, en la idea de la entrega, del compromiso, en la aplicación del término equipo ... y este cambio ha sido posible gracias al trabajo, en todos los aspectos, del técnico amarillo.

    Aún queda mucho por ensamblar, esto no ha hecho nada más que empezar. Hay jugadores a los que el propio equipo le pasará por encima si no están más atentos, porque, además de lo comentado, este año también se cuenta con un excelente "fondo de armario" y dado lo visto nadie quiere quedarse en el ostracismo. ¡El horizonte augura grandes momentos!. Un buen inicio, una mentalidad de alta competición, son los ingredientes que hacen que los seguidores se enganchen y esto, desde luego, no tiene pinta de ser un espejismo.