B. Pérez

El Granca se dio un festín europeo antes del derbi en Tenerife. Así ocurrió este martes en el Gran Canaria Arena, en partido de la Eurocup donde los amarillos recuperaron el pulso de la competición superando sin piedad a un inconsistente Ratiopharm Ulm (125-78). Contrariamente a lo esperado, el juego no reflejó la igualdad clasificatoria con la que ambos rivales se encontraron en el parqué.

Fue un partido de coser y cantar para el equipo de Jaka Lakovic, que se enfrentó a un rival con los brazos caídos a nivel defensivo especialmente en el primer tiempo. Las primeras jugadas ya avisaban de que habría una amplia anotación en el encuentro. Porque antes de cumplirse los cinco primeros minutos ya el Gran Canaria sumaba 5 triples (tres de ellos de Brussino) y su rival, otras 3 supercanastas.

En el momento de solicitar los visitantes el primer tiempo muerto, ya el Gran Canaria tenía una brecha a su favor de 7 puntos (19-11). El equipo de Lakovic se gustaba, fluía con soltura el balón y anotaba desde todas las posiciones.

Tan rodado estaba el encuentro que el entrenador esloveno dio entrada a Jakub Urbaniak, su última pieza de rotación, antes del primer cuarto. Incluso un mermado Albicy se iba pronto al banquillo para dar posibilidad de lucimiento tanto para Alocén como Kljacic.

El primer tiempo lo cerró con un triple sobre la bocina de Thomasson, para colocar la mayor diferencia de la primera etapa del juego (68-37) e irse al vestuario con la sensación de que el pescado estaba vendido.

El Gran Canaria no levantó el pie del acelerador en el tercer cuarto, porque tampoco lo permitía su entrenador, elevando a 37 la diferencia en el puesto fronterizo del último cuarto (97-60).

Con triple de Pelos se alcanzó la centena de puntos en el inicio del último parcial de 10 minutos. Fue digno de agradecer el esfuerzo del conjunto germano por intentar que la diferencia no siguiera en aumento, con algunas acciones de mérito que el público -ya en estampida- acabó por aplaudir.

La distancia se fue por encima de los 40 puntos en los últimos minutos, para acabar con la máxima renta del partido en el guarismo final.

Récord de anotación de 40 minutos en Europa     Alineaciones:   Gran Canaria: Albicy (0), Thomasson (9), Brussino (13), Shurna (9), Tobey (9) -equipo inicial-, Urbaniak (11), Kjlacic (13), George Condit (11), Homesley (13), Salvó (20), Alocén (9) y Pelos (8)   Ratiopharm Ulm: Weidemann (9), Plummer (18), Jessup (10), Marcio Santos (3), Herkenhoff (0) -quinteto inicial-, Mueller (0), Jensen (4), Essenge (20), Bretzel (6) y Anigbata (8)   Marcador cada diez minutos: 36-22, 68-37, descanso, 97-60 y 125-78, final.   Árbitros: Guido Giovannetti, Igor Gradojevic y Nick Van der Broeck.   Pormenores: Encuentro de la quinta jornada en la fase de grupos de la Eurocup, disputado en el Gran Canaria Arena ante unos 2.000 aficionados. Los 125 puntos representan la segunda mejor marca de anotación en Europa del Gran Canaria. La mejor puntuación es de 128 puntos, aunque con dos prórrogas frente al Lyon, en 2017.