La UD firma un encuentro creativo e incisivo ante el Villarreal, pero no consagra sus ocasiones y sufre el castigo de un rival contundente en la recta final del encuentro
Demasiado castigo para la UD Las Palmas. Regresa otra vez con derrota (3-1) de la Península, en un partido donde mostró su versión más original, creó iniciativas de gol preocupantes para el Villarreal, pero dejó vivo a su adversario que castigó con contundencia en el tramo final.
En La Cerámica de Villarreal ocurrió lo que viene siendo casi como una norma en cada uno de los recientes encuentros de la UD Las Palmas. La primera oportunidad del partido, clarísima ocasión, la malograron los jugadores de Luis Carrión. Difícilmente Fabio Silva, autor del desdichado remate, podrá disfrutar de balones tan profundos y peligrosos como el que le entregó Moleiro en el minuto 10. El tinerfeño se zafó de su par y puso un ‘pase atrás’ magnífico, que el portugués malogró con un disparo sin precisión. Estaba a dos metros de la portería.
El Villarreal quería dictar el partido e, incluso, lograba por momentos resolver algunas ecuaciones defensivas de su rival. Pero Las Palmas llegaba con mucha intención cada vez que sus jugadores de vanguardia cruzaban y se asociaban tras la línea central del campo.
La segunda ocasión grancanaria tuvo como protagonista a Benito y McBurnie. El aldeano colgó un centro perfecto en el minuto 20 y el escocés lo cabeceó lanzándose en plancha y girando su cuello en el momento de contactar con la pelota. El remate iba a la base del poste, pero el portero Conde se estiró para desviar a córner y desactivar el segundo susto local.
No había dos sin tres. Esa tercera ofensiva canaria tuvo de nuevo como protagonistas a Moleiro y Silva, en el minuto 24. Esta vez, el centrocampista lanzó un balón vertical para la carrera del delantero luso. Silva logró tocar la esfera antes de arribar el área, pero Diego Conde también rozó lo justo el cuero para evitar que superara su desesperada posición en el borde del área.
Las sensaciones futbolísticas eran mejores que el resultado, que dibujaba injusticia con los visitantes. Aunque también el Villarreal empezó a llegar con intenciones de anotar el primer gol. Lo tuvo Sergi Cardona en el 34, al rematar un balón suelto que Horkas salvó con el pie.
Pero antes del descanso se cumplió la otra norma: El indulgente no es perdonado en el fútbol profesional. Porque el Villarreal logró irse al descanso con el marcador a su favor. Ocurrió tras una jugada de ataque de Januzaj, cuyo excelente servicio no encontró remate. Pero el Submarino lanzó una contra que acabó con gol y polémica. Akmobach dejó en el piso a Juanma y Suárez. Asistió a su compañero Pepé, que golpeó la moral de los grancanarios.
Un gol maravilloso y un penalti rechazado
Sin embargo, nada más salir de vestuarios, Las Palmas igualó el partido con una gran jugada entre Januzaj y Fabio Silva. El belga colocó otro balón al portugués que, en esta ocasión, tocó con suavidad el esférico para superar la salida del portero Conde y devolver el partido a su punto de origen.
El partido estaba roto. Y unos minutos después Alex Muñoz cometió un error voluminoso al ceder sin fuerza un balón hacia el portero. Horkas salió y cometió penalti sobre Barry, al no poder evitar el contacto. Sin embargo el croata se creció y rechazó el lanzamiento de Alex Baena desde los once metros.
La respuesta de Las Palmas llegó en el minuto 55. Januzaj terminó un contragolpe con un chutazo desde fuera del área que chocó en el larguero para volver al terreno de juego.
El juego no tenía costura alguna. El balón iba de un lado a otro del campo, con intenciones perversas. El Villarreal llegó a anotar un segundo gol, obra de Barry, pero fue anulado por fuera de juego en el minuto 75.
Pero la situación se repitió en el 83, con los mismos protagonistas, y en esta ocasión el gol de Barry acabó en el marcador tras un remate de cabeza habilitado por la posición levemente atrasado de un pie de Herzog. A partir de ahí, la hecatombe del día con el tercer gol ya en el descuento.
La historia volvía a repetirse en un partido donde Las Palmas volcó toda su imaginación, pero no le sirvió para cambiar su peligroso rumbo en la Liga.
Alineaciones:
Villarreal: Diego Conde, Kiko Femenía, Bailly, Costa, Sergi Cardona (Bernat, 86), Akhomach (Comesaña, 78), Parejo, Denis Suárez (Alex Baena, 46), Gueye (Pau Cabanes, 78), Barry y Pepé (Terrats, 86)
Las Palmas: Horkas, Alex Suárez, Juanma Herzog, Álex Muñoz, Benito Ramírez (Viti, 78), Kirian (Javi Muñoz, 61), Essugo (Jaime Mata, 85), Januzaj (Javi Muñoz, 78), Moleiro, Fabio Silva y McBurnie (Manu Fuster, 61)
Goles: 1-0, m. 44. Tras un ataque amarillo, el Villarreal carga una contra con Barry. El atacante llega al área, conecta con Pepé y este, a la media vuelta, anota de fuerte chut. 1-1, m. 46. Balón profundo de Januzaj que alcanza Fabio Silva y, en carrera, el portugués coloca el balón por encima de la salida de Diego Conde. 2-1, m. 83. Barry remata de cabeza limpio, libre de marcaje, y subre el segundo al marcador tras validación de la Sala VAR. 3-1, m. 96. Contragolpe completo de Alex Baena, que acaba con un chut raso y cruzado.
Árbitro: Mario Melero López (Andaluz). Mostró tarjetas amarillas a Álex Suárez, Dinko Horkas y Fabio Silva (Las Palmas)
Pormenores: Partido de la octava jornada de Liga de Primera División, disputado en el Estadio de La Cerámica de Villarreal (18.159 espectadores). Debutó con la UD Las Palmas el croata Dinko Horkas.
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