De la euforia en Málaga, al desencanto en Estambul. El Gran Canaria perdió este martes (73-65) un partido clave en la lucha por el primer puesto de la fase de grupos en la Eurocup. Se lo arrebatan los turcos del Bahcesehir College Estambul, que fueron mejores en el choque casi desde principio a fin.

El Gran Canaria jugó a repechones, pero no dio tiempo ni tuvo acierto suficiente para remontar un partido que se puso muy cuesta arriba desde el primer cuarto.

Tan importante encuentro quedó condicionado por la explosiva salida al partido del conjunto otomano. La única ventaja del Gran Canaria fue tras las dos primeras canastas de Brussion y Thomasson (2-5), que hicieron despertar al poderoso conjunto local. 

Guiados por el acierto de Cavanaugh y su compañero Bouteille, el equipo turco firmó un primer cuarto con muchos puntos en sus alforjas (29) y una máxima renta de +16, que logró reducir en el sprint final un triple de Pelos y una canasta de Kljacic a falta de un segundo.

El Gran Canaria no estaba cómodo, aunque logró pasar el tifón inicial en un segundo cuarto más igualado. Se echaba en falta los puntos de los bases amarillos y también sus asistencias. Esta fue una fase más de desgaste de ambos conjuntos, finalizada de nuevo con ventaja de los turcos (44-32) aunque ya en el pabellón no había diluvio contra los intereses visitantes.

Ya había emergido en el encuentro la figura del pívot Tai Odiase, que castigaba a sus pares en el juego interior anotando de forma abundante y capturando rebotes bajo propio tablero. No daba Jaka Lakovic con la solución a su control e, incluso, alguno de sus hombres altos expresaba en pista sus nervios, como le ocurrió a George Conditt. 

Reducir la renta no fue fácil para el Gran Canaria, más asentado en el partido durante el tercer cuarto. Había llegado tarde, pero tenía tiempo para reconstruir la situación. 

El conjunto de Jaka Lakovic llegó a colocarse a diez puntos de su rival (55-45) mediado este tercer parcial, tras varias acciones ofensivas de Caleb Homesley.

No aprovechar ese momento y permitir el nuevo despertar de Bahcesehir llevó el encuentro a una contrarreloj para el Gran Canaria en el último cuarto. Saltaron las alarmas en el equipo local tras un parcial 0-7 amarillo a falta de 6 minutos, pasando de un 65-47 a 65-54. Dos recuperaciones, un triple, dos canastas más, tiempo muerto y bronca en el banquillo local.

Dos tiros libres convertidos por Thomasson bajaron a 9 la diferencia a 5.20. El descuento seguía: un triple de Tobey y dos tiros libres de Alocén colocó el electrónico a seis puntos (67-61).

El Gran Canaria se resistía a entregar el partido, especialmente por los voluntariosos Tobey y Thomasson. Una canasta tras penetración de Ponitka certificó el triunfo del conjunto turco, cuyo siguiente objetivo era certificar el basketaverage en los 40 segundos finales del encuentro (73-65). Y ese fue el resultado final porque no hubo más aciertos en la pista.