Fue una noche singular. En el antepalco del Estadio de Gran Canaria se disfrutó de una velada serena, sin sobresaltos ni caras largas. Diego Martínez casi pasó de puntillas, sentándose en la mesa de sus jugadores canarios que representaban a la plantilla. Y aunque él quizá no lo pretendía fue uno de los temas más jugoso de la velada, porque no solo se ha ganado el vestuario sino la opinión de ese perímetro de fuerza que tanto vive los aconteceres de la UD Las Palmas.

Al presidente de la entidad, Miguel Ángel Ramírez, se le vio especialmente radiante. No tenía titubeos en mostrar su sonrisa y en esgrimir que era una lástima que el proyecto de esta temporada no arrancara de la mano de Luis Carrión, pero los resultados de los dos últimos meses vinieron a demostrar que el trabajo del verano -en los despachos- había sido el correcto.

El ambiente tenía un aroma a felicidad con los pies en la tierra. No solo están los ejemplos de antañas campañas de la UD Las Palmas, algunos con finales terribles, sino el propio botón de muestra del ejercicio 2023-24. Los amarillos de aquella nave de García Pimienta cruzaron la frontera del año nuevo en novena posición, con 25 puntos en 18 encuentros disputados. Pero la dura Primera División les hizo ver que las orillas no existen hasta que no son alcanzadas.

“No podemos dormirnos”, insistió el propio Ramírez. La creciente tranquilidad en la competición no fue cortina para otros asuntos que aborda el club. De ello se encargó Patricio Viñayo en su emotiva primera exposición. Habló de una UD “embajadora” en el exterior, de ser un “motor”, “orgullo además de impulso de Canarias”.

Todo ello en el contexto del “enorme reto” que subrayó el presidente del Cabildo, Antonio Morales, al indicar a todos los comensales que el futuro Estadio de Gran Canaria “nos hará sentir orgullosos” de lo que somos capaces de hacer los grancanarios. Porque, en el exterior “no nos conocen bien”, insistió.

Ramírez había dicho que será un “recinto magnífico” porque puede marcar una época en el futuro de la UD Las Palmas, disponible desde 2027 según las previsiones. Por eso el reto es la “salud económica” para afrontar también en las mejores condiciones posibles la competición.

La velada fue más larga de lo habitual, aunque también no extraña de emociones. En el recuerdo de todos, con una ovación dedicatoria, a la mención del malogrado Héctor Dumpiérrez a quien dedicará la UD Las Palmas el inminente clinic de San Antonio donde él era uno de los participantes. “Porque todos los que de alguna forma nos sentimos unidos a esta causa nos merecen nuestro respeto y devoción”, subrayó el director general del club.