Fotos: C. Torres

Se podría casi afirmar que Aitor Sánchez González (13 de diciembre de 2004, Las Palmas de Gran Canaria) echó a andar vestido de amarillo y azul. Cumple en 2024-25 su decimosegunda temporada en filiales de la UD Las Palmas, desde que ingresó muy temprano en benjamín procedente del Veteranos del Pilar. Y el lateral de Las Palmas C ha cumplido todos los ciclos, para situarse ya a las puertas del mundo profesional que pretenda algún día abordar.

Aunque no lo pueda parecer por aspecto, Aitor tiene cualidades físicas portentosas. El grancanario es un correcaminos futbolístico, muy del estilo del recordado David Simón. También es defensa lateral y no pone cara de asombro al recordar que en los controles GPS que le hacían en edad juvenil recorría una media de 12 kilómetros por encuentro. Ese dato lo podrían firmar muchos de sus colegas del balompié profesional. “Fui el jugador que más kilómetros cubrió esa temporada en el equipo B del club. No recuerdo cuántos. Reconozco que me sorprende no cansarme en cuanto a resistencia en el juego. Es uno de mis puntos fuertes. Creo que todavía he mejorado esa capacidad. Trabajo mucho para ello”.

Además de deportista, el joven grancanario está en tercer curso de ingeniería informática porque “eso del mundo del big data me gusta mucho. Quizá pueda ser un lejano destino en mi vida”. A su edad, está en la antesala de descubrir las puertas de un futuro que, de momento, ha soñado en el Estadio de Gran Canaria.

En esa imaginación personal quiere verse algún día frente a frente con un delantero “fantástico” como Lamine Yamal. “Ahora mismo es el jugador al que me gustaría alguna vez enfrentarme. Y creo que podría controlarlo. Tengo piernas para ello”.

Un producto del Veteranos del Pilar

“La Unión Deportiva me captó muy jovencito”, recuerda para los lectores de Tinta Amarilla. “Yo debí destacar en el Veteranos del Pilar, en un equipo que se quedó campeón de su categoría y que se enfrentó a Las Palmas en la Copa de Campeones benjamín. Sí, era un poco revoltoso en el campo. Me gustaba tener la pelota. Y recorría el campo de arriba abajo … marcando goles. Destacaba y supongo que se fijaron en mí”.

El balón se introdujo desde esos inicios en su vida. “En el colegio yo era el encargado de llevar la pelota para jugar con mis amigos”, puntualiza. “Llevo toda mi trayectoria en este club. He visto pasar a mucha gente, he sido recogepelotas en el Anexo y en el Estadio de Gran Canaria. A todos los que han subido al primer equipo los conozco desde que estaban en filiales. He disfrutado mucho con el equipo, también he sufrido”.

El descubrimiento de la cara B del fútbol

Porque entre sus primeros recuerdos Aitor conserva las imágenes del día del Córdoba, que vivió en 2014 en las gradas del Gran Canaria. “Fue la primera vez que el fútbol me hizo llorar. No me esperaba un golpe así. Fue un gran disgusto. Ese día descubrí la cara amarga del fútbol. También se me saltaron las lágrimas el día del descenso de Primera División, en 2018, … Y alguna vez más”

Pero no todos los días fueron así. “La balanza pesa más por las cosas positivas que me ha hecho disfrutar hasta ahora el deporte. Fui componente del alevín que acudió a Villarreal en el torneo Promises, jugué la final four de la Copa de Campeones con el equipo juvenil, he visto de nuevo al primer equipo llegar a la Primera División, … Y lo que falta”.

En relación al conjunto juvenil de División de Honor comenta Aitor que “teníamos un equipazo, aunque yo ese año fue de los que menos jugué en la entidad. Lo disfruté mucho también, porque fue una experiencia muy bonita enfrentándonos a equipos juveniles profesionales”.

Llegar, centrar y de vez en cuando marcar

Se define Aitor como un “futbolista trabajador, que no dudará en dejarse la vida por su equipo. Esa es mi prioridad. Me gusta llegar arriba, colocar los centros y de vez en cuando celebrar algún gol; cuando se pueda”.

Sánchez ya se ve preparado para dar el salto a Las Palmas Atlético o a los escalones que le ofrezca el destino. “Llevo muchos años pensando en ello, preparándome para cuando se dé ese momento. Cuando me llamen voy a demostrarlo”.

Tiene en estima a los laterales de la UD Marvin Park o Álex Muñoz, que le valen como referencias. Pero sus gustos futbolísticos se inclinan especialmente por el brasileño “Marcelo. Siempre me fijé en él cuando estaba en el Real Madrid. Le gustaba más atacar que defender, eso es verdad, pero las cosas que hacía con balón me encantaban. Si tengo que definirse por algunos de la actualidad me fijo defensivamente en Mendy y también en Cucurella, que en la Eurocopa firmó una demostración de poder. Como me gusta ver fútbol me fijo en este tipo de jugadores, aunque de todos se aprende”.

"Quiero enfrentarme a Lamine Yamal"   Aitor tiene aún que descubrir su ruta personal. Le gusta el balón para jugarlo, pero también los números, el banquillo y “hasta la presidencia. ¿Por qué no?”.   El momento sublime en su breve carrera deportiva “El año pasado en general. Porque saqué más carácter en la categoría. Me formé mejor como futbolista, porque afronté la dureza de la categoría. Pude ver lo que es el fútbol de verdad. Fue distinto a todo lo vivido en juveniles, donde Las Palmas gana con holgura en casi todos los campos. Me tocó aprender a perder. He de confesar que nunca había perdido dos encuentros de forma consecutiva y eso se produjo en el inicio de la pasada Liga. Fue un shock, pero ese principio de temporada me enseñó la realidad. Había que trabajar duro porque las victorias así llegarían”   La mejor jugada vista “Yo era muy pequeño, pero todavía me acuerdo del gol de Iniesta para ganar el Mundial (2010). Lo recuerdo todo como si la viera ahora mismo. La jugada en general me gustó, desde el principio al final: Cómo salieron por la derecha, llegaron al centro, avanzaron hasta la banda izquierda y cómo terminó todo con el pase de Cesc a Iniesta. Tenía menos de seis años, pero me acuerdo que lo vi con mis padres en un hotel de La Coruña. Salimos a celebrarlo posteriormente en las calles de la ciudad. Estábamos de vacaciones”   El equipo a batir “No tengo ninguno especial. Solo sé que me gusta ganar. ¿Tenerife o Real Madrid?. Ya les he ganado: al Tenerife en la División de Honor y al Real Madrid en el torneo de Adeje. Solo quiero ganar el siguiente partido”     El delantero al que querría defender “Sin duda; a Lamine Yamal. Es un jugador fantástico, me parece un jugador sublime veo su juego en el Barça disfruto mucho. Ahora mismo es el jugador al que me gustaría alguna vez enfrentarme. Y creo que podría controlarlo. Tengo piernas para ello”   Lo que le enseñó el fútbol para toda la vida “Me ha enseñado que en los peores momentos te percatas quién realmente está a tu lado. Cuando más estás sufriendo ves que las personas que te han halagado, o que te daban abracitos, en esos instantes les cuesta más estar”    Las lágrimas se secaron “Sí, he llorado por el deporte. Ocurrió en la División de Honor frente al Almería o Real Madrid. Como ya dije también el día del Córdoba. Pero las lágrimas se secaron desde aquellos días. Sé en el club donde estoy y es importante aprender a sufrir”   Cuscús con verduras “Sí, me gusta la cocina. Vivo con mis padres, pero cuando puedo y ellos están ausentes hago de comer. Me encanta en preparar el cuscús con pimiento, cebolla y pollo. Cuando llegan de trabajar se quedan encantados con el almuerzo que les preparo. Por cierto, soy hijo único”

La Preferente

“La categoría Preferente estará muy competida este año. Mi rol en el equipo es dar un paso adelante en cuanto a liderazgo, porque ahora soy el segundo capitán. Mi ilusión es volver a repetir la temporada pasada y, sobre todo, ayudar a los compañeros”, concluye.