El fútbol mundial conoció este lunes el fallecimiento del holandés Johan Neeskens a los 73 años de edad. El extraordinario centrocampista fue una de las piezas fundamentales de la Naranja Mecánica  de los años setenta del pasado siglo, finalista en dos ocasiones con su selección frente a Alemania en 1974 y Argentina en 1978. En ambos partidos se le escapó la gloria del título mundial.

Pero Neeskens fue también jugador durante cinco temporadas del FC Barcelona, coincidiendo su etapa con la Johan Cruyff. Y ambos fueron rivales de la UD Las Palmas en la final de Copa de 1978 que se disputó en el Santiago Bernabéu, con triunfo 3-1 para los azulgranas.

Ese es el mayor recuerdo de Neeskens como rival amarillo, enfrentándose en 9 oportunidades a la UD con un balance de seis victorias y tres derrotas (estas, en el Estadio Insular.

En la mencionada final de la Copa, Neeskens fue titular en el once de Rinus Michels. Pero no llegó a completar el encuentro tras una dura entrada de Jorge Fernández, siendo relevado a los 40 minutos por su compañero Macizo.

El Barça alineó aquel día a Mora, De la Cruz, Migueli, Olmo, Neeskens -jugó como defensa central-, Fortes, Esteban, Zuviría, Asensi, Cruyff y Rexach. En los relevos entraron Tente Sánchez, Blay y el mencionado Macizo.

Las Palmas actuó con Carnevali, Gerardo, Roque, Felipe, Hernández, Noly, Félix, Jorge, Brindisi, Morete y Maciel. Luego también entró Rivero.

Había llegado al fútbol español (1974 a 1979) procedente del Ajax de Ámsterdam. En el Barcelona anotó 35 goles en 140 encuentros, logrando la mencionada Copa y la Recopa de Europa de 1979.

Neeskens se caracterizó por ser un jugador polivalente y, a balón parado, un gran especialista en los lanzamientos de penaltis. Los ejecutada con rotundidad: potencia y a media altura. En la final de 1974 fue el autor del gol de penalti frente a Alemania, cometido tras una entrada de Johan Cruyff.

Según los medios neerlandeses, la muerte le encontró de manera súbita en Argelia.