Un hecho singular se desarrolla este fin de semana en la cancha cubierta municipal de Obispo Frías: el balonmano de Gran Canaria se pone al servicio de los colegiados Ángel Sabroso-Oscar Raluy (o viceversa) para que los jueces deportivos debutantes en los JJOO de Londres lleguen con un último test de preparación cubierto. Organizada por la Federación Insular, cuatro equipos (una selección de la capital, otra del Sureste, una de Telde y el CB Ingenio) disputan el cuadrangular mientras Raluy y Sabroso (o viceversa) se examinan porque acuden a la cita de Londres "con el mismo hormigueo en el estómago que hace año y medio", recuerdan. Entonces la pareja grancanaria fue la sensación del arbitraje internacional dirigiendo la finalísima del Mundial disputado en Suecia. Y, ahora, ¿quién sabe?.

El último partido que pitaron antes del torneo amistoso de la cancha de Escaleritas se produjo el 17 de junio, en un encuentro de la fase de clasificación para el Mundial de España 2013 (Bosnia Herzegovina-Alemania) y hasta este sábado no habían vuelto a tomar contacto con el silbato.

"A medida que se acercan las fechas", razona Sabroso, "voy notando esa ilusión especial como la que sentimos antes de acudir al Mundial. Estamos ante una experiencia que va a marcar nuestras vidas y en la que acudiremos con una ilusión tremenda. Vamos con la mentalidad de Suecia; paso a paso, pero a por todas".

Raluy comprende que esta temporada ha sido una campaña de avance en el plano deportivo de ambos, coronada con la actuación en la final de la Recopa entre el Flensburg y el Gummersbach, duelo de rivalidad germana. "Nuestra experiencia en unos Juegos se produjo en México, en los Panamericanos. Esperamos mucho más en los Olímpicos donde me he propuesto disfrutar de este momento tan especial, donde coincidiremos con todos los mejores atletas de nuestra generación, pero también mentalizarme para intentar lograr los máximos objetivos. Estamos preparados para ellos aunque tenemos un hándicap", añade: "España es uno de los pocos países que tendrá participación en los dos torneos de balonmano, el masculino y el femenino. Nosotros dependemos en parte de las trayectorias de nuestras selecciones que, ojalá, lleguen lo más lejos posible".

Sabroso no deja de subrayar la buena salud que goza el estamento arbitral en Gran Canaria. "Si una isla de 800.000 habitantes aporta a la delegación española tres colegiados (añade al de baloncesto, Juan Carlos Arteaga) al movimiento olímpico, esto tiene que marcar un hito histórico. Hay una evidente conexión entre el nombre de Gran Canaria y el mundo arbitral, porque además se trata de dos de los deportes de conjuntos más seguidos de la competición olímpica":

Raluy se identifica con la afirmación de su compañero: "Nos sentimos muy honrados, notamos ese cosquilleo interno por la ilusión y la responsabilidad. El arbitraje de nuestro provincia está sumamente representado en estos Juegos, por lo que nos sentimos muy orgullosos del trabajo que se ha venido realizando durante años en varios deportes".

Tanto al concejal Ángel Sabroso como al funcionario de prisiones Oscar Raluy el deporte supone gestos de sacrificios abundantes. Las vacaciones de ambos en las últimas temporadas están hipotecas con sus participaciones en certámenes internacionales representando a España. "Es algo a lo que ya nos hemos acostumbrado, pero lo hacemos con veradera devoción". Sabroso, además, posee un escudo moral lo suficientemente resistente para afrontar las críticas de los rivales políticos que se han dirigido a sus actuaciones como colegiado. "Las entiendo, porque forman parte de este juego en la política. Porque mi vida es muy pública. Pero la faceta de mis actividades que más satisfacciones me ofrece es el deporte y no lo voy a abandonar porque, al contrario, en él me siento valorado y realizado. El deporte es lo que más satisfacciones me produce; las críticas las escucho pero no me afectan".

Comienza el cuadrangular.Los dos primeros encuentros del torneo arrojó el triunfo del Villa de Ingenio sobre la selección de la Capital (19-26) y de la selección del Sureste sobre la de Telde (23-19). En la imagen, los colegiados dialogan con los anotadores de la mesa (C. Torres)