Leyre Eizaguirre (CN Metropole) y Jennifer Benítez (CN Salinas Santa Lucía) no sólo forman el mejor dúo de saltos sincronizados de España, un equipo merecedor de una participación olímpica. Ambas reflejan en sus gestos las muestras del sacrificio y el pundonor. Leyre estuvo un año parada por una grave lesión de rodilla; Jennifer acaba de salir de un proceso de ocho meses de inactividad por otra lesión de hombro. Sin embargo, las recientemente proclamadas campeonas de España de saltos sincronizados vuelven a saltar juntas y hacerlo a un gran nivel supone una satisfacción sobresaliente.

Hace menos de un mes, Jennifer Batista se consolaba con ver saltar a sus compañeros en la piscina de Vecindario apostada a la vera de su entrenador, Beneharo Bonilla. Su hombró se había roto siete meses atrás. En la primera jornada del Campeonato de España de saltos absolutos celebrada en el CN Metropole el pasado jueves 26 de mayo, se cumplían precisamente ocho meses desde que tuviera que pasar por el quirófano para corregir la rotura de "la porción larga del bíceps y el labrum, un cartílago que está dentro de la articulación del hombro". Sin embargo, lograba su primera medalla de oro del Nacional, y la sonrisa volvía a grabarse permanentemente en su rostro, mientras lo protege con una crema de su curiosa e irónica alergia al cloro.

Para Leyre la vida le depara una nueva etapa en la que otros suelen abandonar el deporte de competición. Las leyes de la evolución nos suelen obligar a desaprovechar el momento en el que la madurez deportiva y las habilidades técnicas se compaginan para hacer de los buenos deportistas grandes campeones y ejemplos de superación. La saltadora del Metropole aprobó las oposiciones para el Cuerpo Nacional de Policía; y a pesar de las exigencias de la profesión no ha tirado la toalla en los saltos.

JENNIFER: "Ha sido una sorpresa volver a competir a este nivel tras la lesión"

- ¿Cómo ha llevado todo este proceso?

- Fueron siete meses con el hombro inmovilizado. Ahora parece que ha sido algo rápido, pero en realidad se me ha hecho eterno. Después de todo eso, me parece increíble haber llegado al nivel al que he llegado a este Campeonato de España. Reconozco que ha sido mérito del gran entrenador que tengo, que ha puesto más confianza en mí que la que tenía depositada yo misma.

- ¿Y qué Jennifer se ha encontrado a la vuelta a la competición?

- Me encuentro quizás mucho mejor que cómo acabé la temporada en el año pasado. Creo que todo depende de las ganas que pones en cada entrenamiento. Este deporte castiga mucho a las articulaciones. Después de la lesión, llegaba a mi casa con dolores que me atravesaban el alma. Parecía que era una vieja a mis 22 años, pero poco a poco esos dolores han ido pasando y ahora estoy en una situación espléndida.

- ¿La lectura es que quizás descansar a veces es tan bueno como trabajar?

- Es cierto que en muchas ocasiones estos descansos vienen muy bien, aunque para la cabeza, pasar por estas cosas no es muy bueno.

- ¿Cuáles fueron los momentos más duros?

- En las revisiones periódicas, el cirujano comprobaba que no recuperaba del todo la movilidad, y eso es muy importante para nosotras. Además, era duro que te dijeran que quizás sería necesario tener que pasar por el quirófano nuevamente. En esos momentos se me venía el mundo encima, pero por suerte todo fue mejor de lo que se presagiaba.

- ¿Y cuáles son los proyectos a partir de ahora?

- Ahora tengo la preparación del Mundial y de la Universiada. Esto segundo va a ser como un auténtico regalo después de todo lo que he pasado en este año. En el Mundial tendré la oportunidad de participar por primera vez en mi vida. Yo no creí que fuese capaz de hacer la mínima, pero Beneharo, mi entrenador, creyó siempre en que lo podía conseguir. Él ha sido quien más me ha empujado, y tal vez por eso la satisfacción ha sido mucho mayor, por la sorpresa que ha supuesto el conseguirlo. Yo ahora voy a meterme de cabeza en las dos competiciones. Han sido dos clasificaciones que poco se esperaban. Ahora ya nadie me puede pedir más, después de todo este tiempo de lucha.

LEYRE: "Es duro compaginar trabajo y entrenamiento, pero merece la pena"

- ¿Qué se siente al competir en casa?

- Feliz por estar aquí y volver a verte con la familia. Es la piscina en la que aprendí a saltar y competir aquí siempre te llena de satisfacción.

- ¿Cómo califica los resultados obtenidos en este Campeonato de España?

- El resultado obtenido es bueno. La temporada pasada estuve prácticamente un año inactiva porque me rompí la rodilla. Después he aprobado una oposición y en estos momentos me ha tocado, trabajar y entrenar. Compatibilizar ambas cosas requiere un gran esfuerzo y también afecta al nivel de rendimiento, así que puedo estar satisfecha con el papel que estoy haciendo.

- ¿Se hace muy duro compaginar trabajo y entrenamientos?

- En el trabajo (policía) me están ayudando mucho a poder llevar esta doble vida. Yo no puedo hacer otra cosa que responder bien y luchar. Se hace complicado saltar a este nivel y también tener que enfrentarte a un compromiso laboral diario; y más de cara a la temporada próxima, en la que hay unos Juegos Olímpicos de por medio. Para llegar a Londres 2012 necesitas grandes dosis de sacrificio, entrenar cada día muy bien y hacerlo, como mínimo, en dos sesiones diarias, y eso sin dejar de trabajar y rendir bien en un trabajo como el mío. En la actualidad sólo puedo aplicar la mitad de lo que requiero. Por tanto, estar aún a este nivel no hace más que reforzar mis ánimos.

- ¿Merece la pena el sacrificio?

- Yo estoy convencida de que sí lo merece. No cabe duda.

- ¿Y qué le diría usted a toda esa gente joven que siempre se escuda en los estudios para no volver a ponerse un bañador?

- Pues que cuando se quiere, siempre se pueden compaginar las dos cosas. Hay tiempo para ello, sin duda alguna.

Juan Pedro Borrego