Mientras la UD Las Palmas está a la espera de algún movimiento de mercado con José Salomón Rondón (el Málaga ha dicho que no le liberará sin el abono de los 20 miilones de euros de su cláusula liberatoria), el Valencia ha presentado una denuncia ante la Liga de Fútbol Profesional porque el pagaré que el propio Málaga le remitió para abonar los seis millones de euros del traspaso de Isco no tiene fondo. El enfado en la ciudad del Turia es monumental porque el jeque Abdullah Althami no ha dado señales y, por ello, han solicitado a la LFP que no inscriban a jugador alguno del Málaga hasta que no se resuelva este asunto. El primer afectado es Santi Cazorla.

Isco, de 19 años, una de las promesas del fútbol español y que en estos momentos se encuentra disputando con la selección española el Mundial sub´20 de Colombia, es una de las diez incorporaciones del megaproyecto que ha realizado el jeque qatarí Abdullah bin Nasser Al-Thani, accionista mayoritario del club, junto a su mano derecha Abdullah Ghubn.

Se estima en más de cien millones de euros el desembolso realizado este verano por el Málaga (que por cierto ha perdido esta noche 2-0 con el Cádiz, de Segunda B, en el Trofeo Carranza) pero esta falta de liquidez podría cuestionar la situación económica del propio club. En caso de que el Málaga opte por la venta de Rondón, a la UD Las Palmas le correspondería el diez por ciento de esta segunda operación.