La pasada semana se intentó zanjar el inicio de una posible polémica. El Cabildo de Gran Canaria envió una nota aclaratoria en la que trataba de explicar los motivos del por qué el césped del Estadio de Gran Canaria había perdido su uniformidad, exhibiendo preocupantes calvas en la práctica totalidad de su rectángulo. Este lunes, mientras el equipo se ejercitaba en el gimnasio de la instalación de Siete Palmas, algunos operarios procedían a aplicar los productos del tratamiento fitosanitario al que está siendo sometido el verde para evitar la denominada mala hierba.

Las explicaciones del Instituo Insular de Deportes no han satisfecho al cuerpo técnico del equipo amarillo. En cualquier caso el viernes se saldrá de dudas: la celebración del partido amistoso frente al Club Deportivo Tenerife se convertirá también el exámen de agosto para el césped del recinto de juego de la UD Las Palmas. Son lógicos los temores, especialmente tras comprobar cómo el rendimiento del equipo ha quedado condicionado en los inicios de anteriores temporadas; en especial en la etapa de Sergio Kresic (2009-10) cuando no sólo perdió uniformidad el césped sino que la abundancia de huecos en su superficie impedía el desarrollo correcto de los encuentros. La plantilla de Juan Manuel Rodríguez cruza los dedos para que el día 20 de agosto todo esté en perfectas condiciones, como asegura la corporación. Ese día visita la Isla el CD Alcorcón, en la inauguración del campeonato.

Por cierto, ya se conocen las dos primeras designaciones de Canal Plus para la Segunda División en las primeras jornadas: Cartagena-Deportivo y Murcia-Celta, respectivamente.