Chus Pereda, un admirador del fútbol canario
27/09/2011

Fue campeón con la Roja en la Europa de 1964 y más tarde seleccionador en las categorías inferiores de la Federación Española de Fútbol

El martes 27 de septiembre de 2011 se llena de tristeza. Falleció en Barcelona, a los 73 años de edad, Chus Pereda; aquel miembro del equipo nacional que fue campeón en la Eurocopa de Naciones de 1964. Pereda, además, dio la asistencia que convirtió Marcelino en el célebre gol de la victoria sobre la Unión Soviética (1-0), en partido disputado en el Estadio Bernabéu el 21 de junio de aquel glorioso año. Su nombre entró entonces en la historia del fútbol español.

Pereda participó en quince ocasiones con la selección española. Debutó el 15 de mayo de 1960 frente a Inglaterra y jugó su último partido con la selección el 27 de octubre de 1968 ante Yugoslavia. En el equipo nacional coincidió con el hoy presidente de honor de la UD Las Palmas, Germán Dévora, que al saber de su muerte le rememora: "Primero le conocí como futbolista en los terrenos de juego donde era hábil y técnico; tenía una extraordinaria calidad. Coincidimos con él en la selección también, en un equipo en el que también estaban Paco Castellano, Tonono y Guedes. Entonces ya era algo mayor pero asistió con el grupo como refuerzo. Personalmente hice amistad con él", matiza El Maestro, "entablábamos amplias charlas junto a Luis Aragonés, hablando de nuestras cosas, de cómo iba la Liga entonces (Las Palmas en aquella época ocupó el segundo puesto en el campeonato)".

La relación perduró cuando Pereda se hizo cargo de las selecciones inferiores: "Venía a Las Palmas para el torneo del Atlántico. Le gustaba mucho el fútbol canario, lo admiraba; convocó a algunos chicos de nuestra cantera en aquella época".

BARCELONISTA

Como jugador, Chus Pereda desarrolló su trayectoria futbolística en el FC Barcelona, aunque se inició en el Real Madrid (1957-68) ganando una Liga y una Copa de Europa. Tuvo escasa presencia en un club donde también estaban Di Stéfano, Gento o Miguel Muñoz. Tras su paso por el Sevilla, durante dos años, recaló en el Barça donde actuó en 9 temporadas (1961 a 1969) para finalizar su etapa en Primera en el Sabadell una campaña más. Con los azulgrana añadió dos Copas del Rey y una Copa de Ferias.

Estuvo vinculado a la RFEF como entrenador de las categorías inferiores. Logró el título Europeo sub'16 en 1988, contra Portugal (0-0 y tanda de penalties), mientras llegó a acceder a la selección absoluta cuando enfermó Vicente Miera como seleccionador. También fue entrenador del Xerez Deportivo.

 

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