Vecinos Unidos: el arte de sobrevivir
04/11/2011

El club pide ayuda al Ayuntamiento de Firgas para el mantenimiento del terrero de Rosales, que aún se nutre de un grupo electrógeno seis años después de su inauguración

El CL Vecinos Unidos es un ejemplo de resistencia ante la adversidad. El modesto club firguense, que zarpó en las competiciones de lucha canaria en 1984, se planteó esta temporada no mantener su escudo en los terreros de Gran Canaria. Porque su eterno presidente, José Luis Sánchez Alemán, afronta unos problemas de salud combinados con la incomprensión política hacia un club vocacional, que da vida en aquella zona del municipio. Pero el veterano dirigente ha reunidos fuerzas para que el ambiente luchístico no decaiga y para que, en el futuro, vuelvan a producirse esos "Madrid-Barcelona de Firgas, entre el Buen Lugar y nosotros", afirma. El siguiente será el 12 de diciembre de 2011.

La ausencia de fuerza pública por designio de la alcaldesa de Firgas impidiendo la celebración del primer encuentro de la campaña en Rosales ha sido el penúltimo obstáculo para el Vecinos Unidos. "Cosas así son las que nos hacen plantear el seguir" añade Sánchez Alemán, que no alcanza a comprender el fondo de este problema, otrora resuelto con cintura política. "A la actual alcaldesa -la popular Paola Hernández- nunca la hemos visto en un terrero, ni siquiera cuando era concejal de deportes", puntualiza.

Los problemas de Vecinos Unidos van más allá de la presencia o no de la policía municipal en sus luchadas. En febrero pasado, Sánchez Alemán remitió un escrito a la Alcaldía para observar una serie de deficiencias del terrero de Rosales y la necesidad de que esta instalación tenga un mantenimiento "para evitar su progresivo deterioro", puntualiza. "Esta obra fue inaugurada por José Manuel Soria, como presidente del Cabildo, en julio de 2005. Era alcalde Chano Arencibia. Y desde entonces, salvo un par de manos de pintura, está abandonada por las instituciones; no hay presupuesto para su mantenimiento y el club no da para más".

Hasta tal punto que seis años después el coqueto terrero de Rosales, con capacidad para quinientas personas, sigue alimentándose de un grupo electrógeno ubicado en una de sus dependencias y que "tenía carácter provisional en el momento de entregar la obra". En su manifiesto al Ayuntamiento -Sánchez Alemán nos entrega una copia- el CL Vecinos Unidos recuerda el potente ruido que emana del aparato, afectando al vecindario de la zona, así como de los inconvenientes propios de su dependencia pues "en numerosas ocasiones se ha parado en mitad de una luchada".

Las quejas del club se dirigen entre otros puntos a las dificultades de apertura de la puerta principal, a la entrada de agua de lluvia por ventanas y puertas, a la humedad en diferentes puntos de la instalación, al alicatado de los baños que ha caído por mal peuge, a urinarios tupidos, incluso penetración de agua de lluvia a través de alguna zona de la techumbre, a los cristales rotos de los ventanales donde, curiosamente, algunos de ellos no pueden cerrarse por la desproporcionalidad de los mismo en relación a los huecos previstos, ... Un compendio de desperfectos que "parece incomprensible para un pabellón que apenas tiene seis años de uso". Nos muestra también el presidente algunas equipaciones que no llegaron a completarse como una bomba contra incendios o los espacios habilitados para la instalación de altavoces: en ambos casos los cables esperan al destinatario.

Ciertamente el terrero de Rosales es acogedor y desprende un aroma a deporte del de antes. Pero el progreso es imparable y el club no se explica por qué ha decaído el interés municipal por sus servicios a la comunidad. "Tenemos varios proyectos para intentar mejorar estas dependencias porque para sobrevivir hay que progresar también". Pasan por la instalación de una cafetería y una ampliación para tener un gimnasio propio. "No nos importa de qué color sea el partido político que dirija Firgas, simplemente pedimos ayuda para solucionar estos problemas y para que el club pueda seguir adelante otros treinta años más".

 


 

De 119.000 euros a 20.000 en el presupuesto

"Todo empezó con una luchadas amistosas a partir de 1979" recuerda el presidente Sánchez Alemán, en aquella época titular de la asociación de vecinos. "Recibimos mucho apoyo de otros alcaldes, como fueron los casos de José Henríquez y Ssebastián Arencibia. Llegamos a estar en Primera o fuimos campeones regionales de Tercera en otras etapas. Aquí se vivía un gran ambiente luchístico. Nuestro mayor presupuesto fue de 119.000 euros; contamos con destacados luchadores como Joan Lajo, Gustavo Araña o Juan Torres". Sin embargo la situación actual es otra: "Nos cuesta cerrar los números. Tenemos unos 20.000 euros de presupuesto actualmente, con 8.000 que proporciona el Ayuntamiento, 4.500 el Agua de Firgas, 2.000 el Cabildo, 3.000 la Federación y el resto con pequeñas aportaciones. 15 luchadores seniors, 6 juveniles y 8 cadetes; esa es nuestra plantilla. Y poseemos una junta directiva que tiene ganas de trabajar porque, además, ellos saben que mi relevo está próximo. He prometido estar un año más, a ver qué somos capaces de solucionar hasta entonces".

Comparte el artículo si te ha gustado
También te puede interesar