Tres de los jugadores más significativos de la época de Aureliano Estévez le han recordado este miércoles en nuestra web Tinta Amarilla.es, tras conocerse su fallecimiento. Dos de ellos (Martín Marrero y Guillermo Hernández) fueron laterales con los que compartió rivalidad por los puestos titulares y el tercero (Germán Dévora) fue su capitán y ahora presidente de honor de la entidad. Subrayan que era un futbolista veloz que "atacaba mejor defendía" y coinciden en afirmar que Estévez fue un futbolista "de club" eficiente.

* Germán Dévora le considera como "un lateral muy ofensivo, que poseía mucho ritmo en su juego. Quizá padeció algunos altibajos, pero en nuestro equipo proporcionó muchas soluciones. En el campo era un jugador nervioso, con unas condiciones físicas muy notables. Martín Marrero tenía más calidad pero Estévez siempre estaba dispuesto a batallar. Con Pierre Sinibaldi tuvo quizá más presencia porque su fútbol salió beneficiado con el sistema de aquel entrenador. No tenía problemas para actuar en una u otra banda, por lo que suplía también a Hernández en el lateral izquierdo con eficacia. Hablamos de un jugador de club".

* Martín Marrerotambién subraya que "Estévez era un jugador con mucha salida. No le considero más ofensivo que en mi caso, porque era también un futbolista que vigilaba con rigor, expeditivo en los marcajes. Nosotros le decíamos en el equipo 'el ciego'. Era una broma porque tenía lentillas y eso le hacía diferente al resto. Para Las Palmas resultó una ayuda tener a un jugador tan eficiente en sus filas".

* Guillermo Hernández le recuerda como un futbolista con un concepto de "juego de ataque. Estévez subía muy bien la banda y centraba. Comparado conmigo, él era más ofensivo, pero yo marqué más goles, ¡eh!. Sin embargo, tenía mucho oficio, cubría bien con el físico. Se le encomendaban marcajes importantes y los resolvía bien. También opino que se trata de un club jugador típicamente de club, polivalente, ... "

Hernández revive al pensar en Estévez una anécdota que ocurrió en Sevilla. "Estaba con Carmelín y conmigo de paseo cuando vimos a un señor con tres vasos y una piedra. Los movía y le invitaba a apostar. Era el típico timo y le dijimos que lo dejara, que no aceptara. Pero Estévez estaba convencido de que era capaz de acertar siempre donde estaba la piedra. Ganó la primera jugada y luego perdió el resto. Le 'levantaron' todo el dinero; no era una gran cantidad. Se enfadó muchísimo".

Javier Campos: "Intenté imitarle"

A una etapa posterior, en la década de los ochenta, corresponde el concurso de otro lateral destacado en la UD Las Palmas, Javier Campos. Así recuerda a Estévez: "Tuve la fortuna de compartir sus últimos días como futbolista en la UD Las Palmasjunto con los primeros días míos tras el descenso contra el Athlétic de Bilbao. Y para mi es un recuerdo muy bonito el poder vivir junto a tantos jugadores de la clase de Estevez, Páez, Noly, Roque, Felipe,Félix, ... la experiencia de jugar junto a todos ellos después de haberlos visto en los terrenos de juego cuando era un niño. Era como si los conociese de toda la vida. En el caso de Estevez además une que era el jugador en el que me tenía que fijar para poder intentar mejorar. Estévez era regular, disciplinado y profesional, armas que le sirvieron para jugar tantos y tantos partidos como temporadas. Se merece un reconocimiento. Gracias por todo lo que nos diste".

Una formación de los setenta: Carnevali, Estévez, Felipe, Hernández, Roque Noly (de pie), Felo, Brindisi, Morete, Jorge y Pepe Juan (agachados), en el Estadio Insular (Norberto Rodríguez)