Toba, el director de orquesta calculador
03/04/2012

Jugador de notable personalidad, transmitía serenidad a Canteras UD y Escaleritas desde la posición de mando en los equipos en que militó

Uno de los ilustres jugadores del balonmano de Canarias nos ha dejado este martes, 3 de abril de 2012. Cristóbal Santana Tarajano (Las Palmas de Gran Canaria, 3 de febrero de 1960) ha fallecido en nuestra capital a los 52 años de edad. Deportista formado en el Canteras UD en cuyas filas llegó a debutar en la División de Honor, fue militante entre otros equipos del Escaleritas y en los inicios del Gáldar. En todos se granjeó el cariño de compañeros y aficionados que le vieron actuar desde la posición de mando.

Toba pertenece a la segunda oleada de jugadores del Canteras que tocó la máxima categoría, después de aquellos pioneros que en la campaña 1972/73 lograron colocar al primer equipo canario en la élite nacional, tras la abolición de una norma colonial que impedía a un conjunto insular de Canarias participar en la División de Honor.

En aquella época del salto divisionario, ya había entrado en la cadena formativa del Canteras desde lacategoría alevín, como recuerda su compañero Sulo, jugador con el que compartió diversos tramos de las trayectorias deportivas. "Debutamos en la misma temporada 1978 en División de Honor con el Canteras", añade el que fuera más tarde capitán y compañero en el Escaleritas.

Desde temprana edad y aún compartiendo juego con ilustres veteranos, Toba demostraba en la cancha la serenidad propia de su carácter. El entrenador Rolando Cardeñosa, que le dirigió en el García San Román dentro de la Primera División, le señala como "un central con una personalidad definida, que era capaz de darle un tiempo al partido según convenía. Pausado o vivo. Era diferente a sus antecesores en el puesto, Chicho Calero y Felo, porque su juego era más reflexivo. Se metía muy bien entre líneas y conectaba con soltura con el pivote".

DISPARO CON SELLO PERSONAL

Lo que Cardeñosa define como "buenas lecturas de los partidos" fue una de las características de su balonmano. Además, Toba poseía un disparo de cadera con sello personal que siempre era "difícil de predecir por parte del portero, de ahí que muchos de sus goles se produjeran con la defensa rival posicionada".

Compartió vestuario con notables jugadores albinegros del Canteras y amarillos del Escaleritas, en la que se podría considerar como etapa dorada del balonmano en la capital grancanaria. Tobita era un director de orquesta con carácter, capaz de distribuir su propia partitura para aparecer sorpresivamente en distintas posiciones de primera línea, tanto en los extremos como especialmente en el duro trabajo de pivote.

"VIVÍA EN LA ESQUINA DEL ELISEO OJEDA"

Uno de los entrenadores que más influyó en la trayectoria de Toba Tarajano fue Leoncio Castellano quien, afectado por la triste noticia de su fallecimiento, nos acertaba a decir lo siguiente: "A Toba le conocimos desde que era un niño. Su vida fue el balonmano. En realidad la casa de sus padres estaba en una esquina de la cancha Eliseo Ojeda, la Meca de nuestro deporte en la capital".

Las idas y venidas de Toba al Canteras y Escaleritas no modificaron su carácter como jugador. "Se trata de uno de los centrales más obedientes y ordenados de cuantos he tenido a mis órdenes, uno de los mejores en su puesto sin duda. Yo le recuerdo por su mentalidad táctica que califico como muy cerebral, porque no se alteraba a pesar de las circunstancias del partido. Esa personalidad serena la sabía transmitir también a sus compañeros".

Leoncio le vio jugar por última vez el pasado verano porque "en los partidos de veteranos él era uno de los primeros en apuntarse, a pesar de su enfermedad. Tenía una vitalidad tremenda, quería salir adelante. Su actitud nos conmovía. Siempre fue un hombre muy positivo", recuerda el legendario entrenador.

Su última aparición pública se produjo el pasado 13 de noviembre de 2011, en el remozado pabellón Municipal de Escaleritas. Aquel día Toba estuvo con sus compañeros del Canteras UD, Escaleritas y Tres de Mayo para presenciar en un banquillo el torneo de homenaje a otro de los grandes que falleció el pasado 8 de agosto de 2011, Abilio Mendes. Toba recibió la ovación de cuantas personas en el antiguo teatro del balonmano isleño. Se la llevó al cielo.

Manuel Borrego

 

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