Foto: Fernando Sánchez
Tenía ganas de verdad Mauro Quiroga, tanto lejos alejado de un festejo goleador. Marcó él el empate y luego celebró con estas muestras enérgica el de la victoria, obra de Vitolo -fuera de imagen-. El argentino termina así su segunda temporada de amarillo, pletórico de energía y de ganas de dedicar más goles en el futuro a su primogénito grancanario.