El ex jugador asturiano, retirado en 2008 por una lesión, debuta esta temporada como asistente del conjunto juvenil C de la UD Las Palmas
Cuatro años después, el avilesino Miguel Cobas Obarrio (14 de julio de 1977) regresa a la Unión Deportiva Las Palmas. La abandonó porque, tras los dos primeros partidos de la campaña 2008-09, una lesión de rodilla le impidió seguir en el fútbol profesional defendiendo el escudo grancanario, club que cerró su periplo deportivo después haber disputado un total de 59 partidos de Liga desde 2006. Sporting de Gijón (1996 a 2004) y Racing de Ferrol (2004 a 2006) fueron los dos conjuntos anteriores a su arribo en el Archipiélago.
Cobas no se fue de Gran Canaria; se trasladó a residir al Sur de la isla capturado por un corazón canario y por los tesoros que la Naturaleza le brinda (es amante de la pesca submarina). Se desligó del fútbol pero ahora vuelve a enlazar con él a través del equipo juvenil C de la entidad, donde asiste a Aníbal Díaz como segundo entrenador.
Su nueva labor deportiva ha comenzado esta semana en el Campo de Fútbol Mundial 82, de Jinámar, que se ha convertido en el centro de operaciones de un filial en fase de construcción, donde se combina la preparación de la pretemporada y la revisión de distintos valores de otros clubes que realizan su prueba de ingreso en la fábrica.
Cobas observa, junto a Aníbal Díaz, el estiramiento de los jugadores del juvenil C de la UD Las Palmas (C. Torres)
"Me había alejado un poco del fútbol, aunque en alguna ocasión he ido al Estadio a ver al equipo", confiesa el ex jugador asturiano. "Pero he venido a aprender este oficio de entrenador, que puede ser mi futuro. Es un placer trabajar en un club con una filosofía tan de cantera". Cobas pudo sentir cierta decepción porque se vio obligado a colgar las botas con 31 años de edad cuando mejor se encontraba en la UD Las Palmas, después de dos temporadas ejerciendo en una "de las posiciones más complicadas y comprometidas de los equipos (pivote defensivo). Es verdad que había acabado muy bien el ejercicio anterior, pero ya tenía mis temores cuando empezamos la temporada siguiente con Juan Manuel Rodríguez. Sentí que la rodilla, la izquierda (la suya natural), era inestable hasta que ya no aguantó más. Creo que el club también temió por la resistencia de mi rodilla y por eso contrató a Miguel García, que finalmente me suplió".
El desgaste de su articulación fue un calvario para el jugador asturiano que, sin embargo, se había creado su propio espacio dentro de la plantilla profesional grancanaria. "Mantengo todavía buena relación con David García, que fue la persona que me abrió los brazos cuando llegué al equipo. Recientemente hablé con Nauzet ... pero es verdad que, desde entonces, la Unión Deportiva ha sufrido una transformación muy grande, con un cambio radical en su estructura deportiva".
"El futuro de los clubes está en la cantera", advierte el futbolista que procede de una de las escuelas futbolísticas de mayor prestigio del país: Mareo, del Sporting de Gijón. "Creo que las enseñanzas que allí recibí me pueden ayudar en mi labor como ayudante de este equipo filial". Entre otros técnicos en formación, Cobas tuvo a Javier Vidales en el segundo equipo sportinguista.
Sus conocimientos de la plantilla actual se van extendiendo aunque "no he visto tanto al equipo todavía, pero el partido contra el Tenerife me pareció que Las Palmas tiene un estilo presionante y bonito. Creo que Sergio Lobera viene con unos criterios bien definidos que pueden servir de provecho con las cualidades de jugadores importantes de la plantilla. Viene con muy buenas referencias, hay que estar esperanzados".
De los jugadores que han aparecido en las últimas temporadas, el asturiano se queda con un nombre: "Quizá por que sé que es uno de los puestos más debatidos de todos los equipos, el de pivote defensivo, que era mi puesto. Javi Castellano ha sido una absoluta sorpresa; ha mostrado una madurez la pasada temporada que realmente me ha causado una gran impresión. Fue un futbolista con mucha personalidad. Pero ya sabíamos que además Las Palmas posee jugadores en una proyección importantísima como lo son Jonathan Viera o Vitolo. Que existan tantos canarios en el equipo es la señal correcta de que su cantera está cualificada. Ahora me toca comprobarlo a mí desde dentro".
M.B.