Mariano Barbosa vivió las dos sensaciones antagónicas del deporte el pasado sábado. Detuvo un penalti y fue ovacionado, mientras más tarde recibió el desaliento popular cuando el equipo perdía 1-3. "Más en mi caso, puedes pasar de héroe a villano en un segundo. A nadie le gusta jugar con un ambiente así. Mejor que se lo hagan los equipos visitantes". No obstante, el portero argentino recuerda que "los de afuera (grada) en ningún lado ví que ganaran o perdieran un partido. Eso se decide en el campo".

El portero argentino se fija en el tercer gol del Alcorcón que procede "de una distracción a pelota parada. Son cosas que pueden pasar, puede haber un mérito de un jugador rival también. Había mucha gente en el área en aquel momento. Son cosas que se pueden corregir (...) Tenemos que cortar de raíz estas cosas. La estrategia te puede proporcionar puntos, pero también te los puede quitar".

Recordó este lunes el episodio vivido la pasada temporada por Iker Casillas y el Real Madrid cuando cualquier balón de ataque que surgiera en una acción de estrategia levantaba la incertidumbre. "No podemos tener una obsesión con ello. Esto se supera y se olvida. Es corregible".