Quique Hernández, entrenador del Hércules, no ha logrado la reacción de su equipo tras relevar a Juan Carlos Mandiá. Administra una tormenta en el Rico Pérez, que espera empiece a ceder con motivo de la visita de la UD Las Palmas, este domingo. Teme la velocidad de los delanteros amarillos en el partido del domingo, que ha cobrado un gran relieve en la entidad alicantina: "Tenemos ganas desde el lunes o martes de jugar contra Las Palmas, porque llevamos un rejón metido (por la última derrota, 1-5 frente al Xerez)".

Así se expresó este viernes:

"Debemos salir de abajo lo antes posible. Necesitamos una racha positiva, tal como ha hecho Xerez y Las Palmas, porque pasaron momentos de crisis. Cuanto más ayuda tengan los jugadores, mejor. Porque la falta de confianza se traduce en errores. Necesitamos a la afición"

"Si el clima es más favorable, mejor para nosotros. También tenemos que poner de nuestra parte"

"Veo a mi plantilla bien de estado de ánimo. Estamos en un momento muy delicado, pero los jugadores están capacitado. Nadie quiere ver al Hércules en Segunda B"

"Sabemos por qué nos suceden las cosas. Estamos en deuda con mucha gente"

"Si no subimos el nivel de juego, tendremos problemas. Vamos a crecer como equipo. Hemos empezado el cambio con el entrenador. Intentaremos jugar bien, que no está reñido con el trabajo duro y la humildad. Todo ello está unido a los resultados"

"Nos falta profundidad y mejorar cuestiones tácticas. Hemos visto nuestros errores y ahora nos cuestan muy caros"

"Braulio (delantero majorero del Hércules) podría jugar contra Las Palmas, pero es absurdo arriesgar cuando está en el tramo final de la recuperación. Es mejor no hacerlo en su caso"

"A Las Palmas le gusta jugar bien al fútbol. Es un equipo 'tipo Las Palmas': con espacio nos haría daño, no hay que dejárselos. Tiene experiencia, velocidad, ... hay que defendernos bien"

"Sabía dónde venía; la plantilla es corta. Regresé contento y con ilusión; está intacta. También mi moral. Hay mucha gente que ha confiado en mí. Nuestra plantilla es muy buena y está rindiendo muy por debajo de su nivel. No es un desprecio; es un halago. Hay buena actitud"