Estamos a tan pocos días del comienzo del primer Mundial de Balonmano Masculino que se celebrara en nuestro País que somos muchos los que olemos el pegué del balón en nuestras manos por el deseo de ayudar a España en el objetivo de alcanzar la anhelada Gran Final y... Ganarla !!!

Enero de 1.978, un grupo de canariones ( y algún 'godillo' reciclado) nos trasladamos hasta Dinamarca para presenciar en primera persona el Mundial de Balonmano: Leoncio Castellano, Eduardo Fernández, Adolfo Godoy, Jaime Sanz, José M. Martín (Ringo), Pascual Vicente, Tomás Peña... Pasamos un frío de mil demonios solo compensado por lo que es y significa estar en un Campeonato del Mundo para los que amamos este deporte.

Anécdotas para escribir un libro pero me voy a detener en la primera de ellas: llegamos un día antes del inicio del Mundial y nos fuimos directos al Palacio de Deportes para comprar las entradas ( como buenos "gomeros" no las habíamos reservado). Más de diez taquillas y sólo una abierta, a la que se fue Ringo para "entenderse" con el taquillero... Ringo nos informa que no hay problemas de entradas y que bastaba con estar al día siguiente una hora antes del partido para comprarlas ???

Nuestra sorpresa fue que cuando llegamos "dos horas antes" del encuentro a por las entradas todas las taquillas estaban cerradas y la multitud en todos los accesos era tal que nos vimos sentados en la fuente de una plazoleta central con ganas de meter a Ringo dentro de ella.

Para alegría nuestra, Leoncio ve pasar a un individuo de unos 60 años, obeso y enfundado en un abrigo enorme. Se le acercó, le saludo y hablando en un correcto español le decía a Leoncio que no habían entradas desde hacía meses ya que como es sabido, el balonmano es el primer deporte en Dinamarca... Era Rumano y conocía a Leoncio de un curso de tecnificación que le había impartido y estaba como Delegado Federativo de La IHF en el encuentro.

Después de explicarle nuestra situación y llorarle todo lo que pudimos para ver si nos conseguía las entradas, se marchó y quedamos a la espera de su gestión. Para suerte nuestra, como buen rumano, nos consiguió las entradas y pudimos ver el partido...

Enero del 2.013, veinte y cuatro selecciones encuadradas en cuatro grupos con sedes en Granollers (G-A), Sevilla (G-B), Zaragoza (G-C) y por último Madrid (G-D). Será en este último grupo donde España juntó a Argelia, Australia, Croacia, Egipto y Hungría; luchara por alcanzar un puesto para entrar en octavos de final. Para ello, debe quedar entre los cuatro primeros de su grupo, teniendo en cuenta que cuanto mejor quede en esta Fase Preliminar, mejor cruce tendrá en las eliminatorias.

Desde el próximo día 11 en Madrid a las seis de la tarde (hora canaria) y por Teledeporte donde España se enfrentará a Argelia, hasta la deseada Final del día 27 en Barcelona; los amantes del balonmano estaremos pendientes no sólo de los encuentros de nuestra selección, sino que esperamos del Canal Televisivo que no nos prive de presenciar los partidos de mayor interés deportivo de este Mundial de España.

Igualmente, estaremos pendientes de las evoluciones de los gran canarios presentes por méritos propios: Dani Sarmiento, Ángel Sabroso y Óscar Raluy. El primero como componente de nuestra selección y los otros, como la única pareja de árbitros españoles seleccionados por La IHF para este Mundial.

Dani Sarmiento es hoy por hoy titular indiscutible del Barcelona y de nuestra selección y sólo esperamos que le respeten las lesiones ya que su juego "entre líneas" en la lucha del uno contra uno buscando el punto débil para hacer gol o dar pases fantásticos a los pivots; es muy proclive como digo, a tener lesiones por las duras entradas de las defensas contrarias.
Si los buenos árbitros gran canarios no llegan a arbitrar la final del campeonato que sea porque la juega nuestra selección y si no fuera así, que tengan la suerte de ser designados para dirigirla y seguir demostrando el nivel de excelencia que poseen.
A España se le presentan dos "huesos" en la Fase Preliminar como son Croacia con su ya conocido juego duro y físico; y Hungría con esa forma "libertina" que si tienen su día de inspiración nos lo pueden poner muy difícil.

Mantengo el firme criterio que cuando el nivel de juego en el enfrentamiento de dos equipos es similar, son los pequeños detalles los que marcan diferencia. Más aún que los sistemas o tácticas a aplicar porque se conocen hasta la saciedad...Desde cómo saludas al contrario antes del partido, hasta como animas a tus compañeros, son esos pequeños detalles los que en similares condiciones, sacan diferencia a favor de quien esta 'más enchufado' y con la fe puesta en la victoria.

Por todo ello, habrá que ir paso a paso en el objetivo inicial de ser primeros de grupo y así enfrentarnos al cuarto del grupo C en octavos. A partir de ahí, cada partido será una final que habrá que jugarla y ganarla...

Deseo que este Mundial, afectado como casi todo por la crisis económica, tenga una gran concurrencia de espectadores, disfrute de una excelente organización y pueda darnos la alegría de levantar La Copa del Mundo de Balonmano.

¡Ánimo España!