Manuel Borrego

Fue el delantero de moda en el verano. Sus siete tantos durante la pretemporada de la era Lobera le colocó muy cerca de un hipotético debut profesional con la UD Las Palmas. Cristian Herrera parecía que podría encontrar pronto la tierra prometida, pero la delantera ha sido la línea más reforzada esta temporada por Pío XII para confeccionar el más competitivo equipo posible. Primero llegó el galo Thievy Guivane, luego el nigeriano Macauley Chrisantus, ... y en enero se producen los arribos siguientes con el peruano Andy Pando y el polivalente Tato.

"La competencia es un ingrediente más en esta profesión; señala la necesidad que tenemos de mejorar todos los días", indica Cristian reconciliado ahora con las redes rivales después de anotar tres tantos la pasada semana: uno en el amistoso SK Brann noruego y otros dos a la UD Lanzarote. "Me siento bien, centrado en marcar goles que es lo mío; trabajando para el equipo, para lograr el ascenso ayudado por mis compañeros (...) Jugar en Tercera no lo interpreté nunca como un paso atrás después de la pretemporada. Hacerlo me permitía estar en forma y esperar mi oportunidad. Todos los días sueño con debutar en la UD Las Palmas. Aún estoy en ello, que es un paso personal muy importante".

Cristian aceptó desde la pretemporada entrenarse con el primer equipo y actuar en el campeonato de del filial. "Valoro mucho estar en competición, tener ritmo de partidos", insiste de manera obsesiva. "Como delantero, además, siento la recompensa de los goles. Llevo ocho en la primera vuelta, dos más ahora y espero seguir sumando. ¿Una cifra?. Espero alcanzar los veinte pero si no los logro y Las Palmas Atlético asciende estará bien compensado".

Hace dos temporadas, Herrera vivió una segunda vuelta excepcional firmando catorce dianas con el filial. "Importa más el ser constante con el gol a lo largo de toda la campaña". En el filial le ha llegado también competencia con Héctor Figueroa (procedente del Estrella) y Leandro Merino (del Ibarra). "Son dos buenos futbolistas, que se han integrado rápido en nuestro vestuario. Héctor tiene unas cualidades que nos beneficiará en ataque y Leandro ... es muy bueno. Lo conocíamos del Ibarra. Salvando las distancias, por supuesto, me hace recordar el estilo de Messi porque lleva el balón pegado al pie a gran velocidad".

El delantero grancanario conoce bien el peligro que nutre una promoción de ascenso. La vivió frente al Sestao River y Manlleu. "Algo sí ha cambiado esta temporada. La mentalidad es la de ser primeros de la competición, porque eso nos va a brindar una doble posibilidad de ascenso". Su horizonte, de momento, no va más allá de junio cuando termine contrato con el representativo grancanario y entonces club y jugador analicen la nueva situación que se genere tras la temporada. "No preocupa otra cosa, insisto, que marcar goles. Mis retos personales no son más importantes que los colectivos. Me apetece subir a Segunda B con estos chicos, que forman un vestuario magnífico. Es un grupo fantástico de compañeros, que todos los días viene a trabajar con una ilusión muy grande. Sabemos que se ha logrado muchas cosas esta temporada pero todo se resumirá en la promoción".

Se fija en algunos jugadores de su plantilla. "Me ha sorprendido esta temporada la evolución de Asdrúbal y Néstor, pero creo que es justo resaltar que Omar (Fleitas) es un jugador excepcional y regular. Es un futbolista solidario que, a título personal, me sorprende que no hubiese tenido una oportunidad en el primer equipo hasta el momento en las últimas temporadas".