Desde hace ya casi 10 años y con toda la razón del mundo no se para de protestar sobre el Estadio de Gran Canaria. Que si el follón para llegar, las interminables e inútiles pistas que impiden el pleno disfrute del espectáculo, un estadio sin terminar que ya tiene goteras, mal diseñado con inaccesibles baños ... en definitiva y para entendernos: ¡mal parido! Lógicamente a tal despropósito se le tiene que buscar solución que no pasa por otra que no sea la de eliminar las pistas de atletismo. ¿Cómo?
Pues ni lo sé ni me interesa, así de claro, sea lo que sea que hagan será una chapuza y posiblemente quedará hasta feo (véase Juegos del Mediterráneo en Almería) y porque se haga lo que se haga no va a solucionar el principal problema: El pelete!! El estadio seguirá a la misma altura y estará orientado en la misma dirección. Al que se le ocurrió poner un cementerio en esa zona lo clavó y al que se le ocurrió poner un estadio no merece ni que se le mencione.

Solo hay una solución: volver al lugar de donde nunca debimos salir, al Estadio Insular. ¿Y por qué no? A ese recinto se le pueden construir graderíos laterales como para dejarlo con casi 30.000 espectadores, remozarlo, pintarlo de amarillo y convertirlo en un verdadero estadio de futbol. ¿Gasto económico excesivo? Pues teniendo en cuenta que lo que se va a gastar en el EGC no va a servir para nada, pues tampoco es tanto. Además, a ese hipotético Nuevo Estadio Insular se le podría sacar mucho mas partido, sin ir más lejos y para salir de lo estrictamente deportivo, al concierto de Springteen hubiesen ido muchos más de los 22.000 que subieron a Siete Palmas para ver al Boss. Seguro. Y en lo deportivo ni les cuento, un estadio no da ascensos pero ayuda y mucho. El calor (físico y climatológico), una segura mayor afluencia, el factor psicológico para el rival de jugar en campo enemigo y no en uno neutral (o casi) como el E.G.C. y otra cosa... ¿Quién no ha pensado alguna vez "eso en el Insular no lo pita"? ¡El futbol es futbol!

No hay nada imposible, no es una lucha utópica generada por la magua, es la verdad que yo siento y ese estadio aún está ahí... esperándonos! Ojalá ese cartel de "no a las pistas de atletismo" se convierta en "volvamos al Insular" ojala que cada vez que nos quejemos del E.G.C. digamos en alto: ¡volvamos al insular! Y ojalá que pudiera pegarles esta idea a todo el mundo para poder vivir de nuevo un partido de la Unión Deportiva Las Palmas en el Insular Porque yo estoy seguro que no volveremos a ser de verdad un equipo de primera hasta que no volvamos a un estadio de primera.