Desde Niz hasta Atouba
31/03/2013

Los potentes saques de banda del camerunés rescatan un recurso de estrategia que tuvo sello propio en otras etapas de la UD Las Palmas

Manuel Borrego

En el tsunami que dejó la actuación de la UD Las Palmas frente al CD Guadalajara, en el Estadio de Gran Canaria, pasó prácticamente inadvertido un hecho que en las últimas jornadas ha cobrado relevancia como añadido en las acciones de pizarra del conjunto grancanario. Y es que Tim Atouba ha exhibido uno de sus condimentos extras como jugador: los potentes saques de banda. El camerunés es capaz de colocar con sus brazos el balón desde el lateral del campo hasta el punto de penalti -en alguna ocasión el sábado se aproximó a los cuarenta metros de distancia-, generando la inquietud entre los zagueros adversarios.

El saque de banda potente fue recurso habitual en otras etapas del fútbol a todos los niveles. Una jugada tan sencilla en apariencia y que ejerce multitud complicaciones para los defensas. En la UD Las Palmas y en el fútbol canario hubo a través de la historia algunos jugadores que se convirtieron en verdaderos especialistas en poner el balón en juego de esta manera, con las peculiaridades que normalizan esta acción (inexistencia de fueras de juego, invalidez de goles directos, ...). Recurrimos a la memoria de José Manuel León para recordar algunos futbolistas que tuvieron como misión añadida esta singular manera de llevar el mensaje del gol al área rival. "Sanz fue el primero, en los años cincuenta (se refiere a Miguel Sanz Rigo, jugador balear que militó en Primera con los amarillos en la campaña 1954-55). Más tarde, en la selección juvenil con los diablillos amarillos, Pedro Lasso, nuestro capitán. Y, el más reciente, Niz".

Porque el caso de este último es el que más recuerdan los aficionados de la UD Las Palmas, aquellos que acudieron al Estadio Insular en los años sesenta y setenta. Niz  (Dionisio Nuez) se convirtió en un mensajero del miedo para el área rival, con sus parabólicos saques de banda buscando la cabeza de José Juan, Justo Gilberto, el mismo León o aquellos especialistas en los testarazos que poseía el equipo amarillo en los años que precedieron y fueron posteriores al subcampeonato de Liga (1969). "Atouba es potente", afirma León; "yo no recordaba uno así como él. Pero Niz tenía un saque más largo e, incluso, desde mi apreciación lo realizaba con menos esfuerzo. La potencia salía exclusivamente de sus brazos, sin necesidad de retorcerse en la acción".

El veterano futbolista camerunés, por tercera vez titular en los planes de Sergio Lobera, se dejó ver este sábado. Su físico impresiona; un hombre aún por descubrir.

Comparte el artículo si te ha gustado
También te puede interesar