M.B.

Tato, uno de los dos refuerzos invernales de ataque de la UD Las Palmas y partícipe titular este sábado frente al Recreativo, fue contundente este lunes al explicar lo que ocurrió en el reciente 0-0 de Liga: "Si los rivales nos estudian debemos saber contrarrestarles". En varias ocasiones durante su intervención ante los medios informativos confesó que "sentimos impotencia" ante el Recreativo, el empate que ha sembrado nuevas incógnitas sobre el fútbol del equipo amarillo en el tramo de la verdad. "Hemos funcionado muy bien hasta ahora", resaltó sobre la manera de jugar que ha llevado a Las Palmas a puestos de promoción de ascenso, "pero los rivales nos analizan y nos pueden haber cogido la vuelta". Aboga, pues, por la localización de soluciones.

"La cosa está preciosa", advirtió al analizar el tramo final del calendario."Ponferradina está pegadito. Acudiremos a Miranda de Ebro a recuperar los puntos que se nos han quedado atrás". No dudó en calificar la actuación amarilla frente al Recreativo como "de las peores que hemos jugado en casa (...) El Recreativo consiguió desesperarnos cortando nuestros pases y nuestro estilo de juego". Más adelante comentó su sorpresa porque "el Recre tenía por sistema un 4-3-3 que parecía innegociable hasta que jugó con nosotros. Cambió el sábado con el objetivo de frenar nuestro ataque".

Rehusó Tato hablar del ascenso directo, sin duda porque las matemáticas pronto declinarán cualquier opción de Las Palmas. Pero señaló que "nuestra situación es envidiable. Ya la querrían catorce equipos de la categoría". De igual forma Tato declinó analizar unas declaraciones de Nauzet Alemán sobre el momento delicado que atraviesa en su creación la UD Las Palmas. "Es que quizá estemos algo atascados. Pero he estado viendo durante el fin de semana fútbol de Segunda División y observo cómo a los equipos les falta frescura a estas alturas de la campaña".

"UN PENALTI CLARÍSIMO"

No tiene dudas Tato de la acción polémica del partido donde él fue partícipe. "Yo venía controlando el balón y Ruymán se lanzó para tapar el centro. Renuncié a centrar y alejé hacia la derecha el baló. Y en su caída me barrió las dos piernas: la de apoyo y la de golpeo. Fue clarísimo el penalti". De ahí que realizara una protesta estéril al linier porque "desde la posición del árbitro es posible que no viera con claridad la jugada, pero sí creo que era una decisión al alcance del asistente".

Contó Tato que después de la jugada y al saque de córner, el propio Ruymán y Zamora "me dijeron que debían dar las gracias al árbitro porque ambos estaban convencidos de que iba a señalar la pena máxima. Pero no debemos escudarnos en esa jugada, que fue una más del partido", añadió el delantero.

Tato explica con su teléfono y los dedos cómo fue el penalti que le hizo Ruymán, no sancionado por el colegiado (C. Torres)