M.B.

Terminaron los torneos regionales de categorías inferiores de 2013 de lucha canaria, con la disputa del Pancho Camurria ganado por Tenerife. Gran Canaria sella su cosecha con el primer puesto en categoría infantil, sin opciones para llegar a la final en cadete y juvenil. El seleccionador Gabriel Ramírez, Pollo del Molino, nos hace balance el primer lugar de lo más reciente: "Acudimos a Lanzarote con dos bajas importantes por lesión, que dentro de nuestros esquemas considero influyentes: Paco Hernández, del Almogarén, y Santiago El Faro, del Adargoma. Además, Rafael Santiago acudió al cincuenta por ciento por su reciente lesión de hombro, que le impedía actuar con absoluta seguridad, que afectaba a su grado de confianza en la arena".

"Sin embargo", matiza Ramírez, "contra Tenerife el primer día de luchas nos vimos 9-9 en el marcador y con la posibilidad de que David Hernández ganara a Eusebio Ledesma. Hubo sus dudas o polémica en una caída del tinerfeño, que según me aseguran llegó antes a la arena. Luego, Eusebio, ni se movió al temer cualquier contratiempo. Estuvimos ahí, muy cerca creo, con lo que viene a demostrar que nuestras bajas pudieron ser decisivas".

Pero con independencia del resultado, Gabriel Ramírez hace un balance general de la temporada para sus selecciones: "Tenemos una buena generación de luchadores, especialmente en la categoría infantil. Ahí hay un equipo que va a dar muchas alegrías si mantienen sus componentes la progresión que han de llevar en los próximos años. Hay luchadores y calidad para ganar más títulos. En cadetes y juveniles también tenemos espacios para mejorar. A nivel individual resalto la figura del juvenil Fernando Godoy, que sumó cuatro puntos contra Tenerife y otros cuatro con Lanzarote y dejó muy buenas sensaciones y fue uno de los nombres que gustó en el torneo".

Ramírez admite que el deporte vernáculo "se desangra en Gran Canaria. Pero entre todos tenemos que hacer un esfuerzo para que tenga un reflote justo. No comprendo cómo hay clubes que no se vuelcan en la formación, aunque entiendo que hay dirigentes que están muy solos, haciendo una labor poco comprendida y apoyada. Pero hemos de volver a nuestros orígenes, a divulgar nuestros valores en la cantera porque allí está el posible renacer de nuestro deporte en Gran Canaria".

Sintetiza Ramírez: "Abogo porque creamos en lo que ya tenemos y nos volquemos en lo que podemos tener. La lucha en Gran Canaria tiene futuro, pero necesita ilusión", admite. "Desde la Federación intentaremos promover actuaciones que sirvan para echar raíces, al margen de seguir con la preparación de los torneos regionales. El 9 de junio celebramos en Santa Brígida una confrontación Norte-Sur, con motivos de las fiestas patronales. Y desde ya estamos empezando a analizar los grupos de luchadores que vamos a seguir para programar con antelación suficiente los campeonatos de 2014".

El equipo infantil de Gran Canaria, campeón de su categoría 2013