Familia Valerón Club de Fútbol
18/07/2013

Manu y su primo Adorán se ponen a las órdenes de Santi Calvo y añaden leyenda a la saga de Arguineguín en la UD Las Palmas

Manuel Borrego

Todo comenzó en el verano de 1991, caluroso como no se recuerda. El CD Arguineguín cumplía su vigésimo quinto aniversario y Vicente Miranda, hombre de fútbol ciento por ciento, se las ingenió para organizar un gran triangular conmemorativo entre los anfitriones verdillos, la UD Las Palmas y el Castilla que entonces dirigía Mariano García Remón, con Juan Esnáider como su principal referencia. En la dura tierra del estadio de la localidad pesquera la estrella fue, sin embargo, un habilidoso futbolista de apenas 19 años, que agotó el bloc de notas de los técnicos amarillos y también de los ilustres visitantes merengues. Miguel Ángel era la joya, un jugador de fútbol ágil y veloz, que puso en jaque a las defensas adversarias. Lucía sobremanera y apenas unas semanas después ya estaba por la capital uniéndose a la causa amarilla.

A la derecha, Manu y Adorán escoltan a su entrenador, Santi Calvo (C. Torres)

Fue el embajador de Arguineguín. La saga de los Valerón siguió con otro miembro, Juan Carlos, más pausado y técnico ... que traspasaría cualquier horizonte imaginado. Ahora vienen más. Dos de sus sobrinos están a las órdenes de Santi Calvo en UD Las Palmas C, que esta semana echó a rodar en busca de un camino en la categoría Preferente. A Manu Valerón ya le conoce la afición de la UD Las Palmas. Es hijo de Manuel, nacido el 30 de septiembre de 1992, con pasado en los juveniles del Deportivo de La Coruña y en el club 'de la casa', Abrisajac FC. En estos días, en fase de prueba, se encuentra también su primo Adorán Valerón, hijo de Pedro, nacido el 8 de noviembre de 1989 y con trayectoria exclusiva en el Abrisajac FC.

El fútbol lo llevan en sus genes. Manu es un jugador de características similares a Juan Carlos; Adorán, en cambio, lleva la estampa de su tío Miguel Ángel. Incluso en el andar ambos pueden recordar a sus predecesores. Este jueves participaron por segunda vez con el Vitamina C amarillo en el entrenamiento celebrado en Barrio Atlántico. Van y vienen, vienen y van a diario desde la patria chica, Arguineguín, y sueñan ahora en amarillo.

Comparten con ilusión lo ocurrido en los últimos días tras el regreso de Juan Carlos a la entidad desde donde partió hacia el fútbol profesional. Ambos estuvieron el martes en el Estadio de Gran Canaria para comprobar en sus graderíos la multitudinaria presentación del tío Juan Carlos. "Estamos muy orgullosos", señala Manu, con réplica de Adorán. "Y he de decir que también sorprendidos. Porque su fichaje por Las Palmas fue de alguna forma una sorpresa. Siempre pensamos que, pasados tantos años en La Coruña, su retirada iba a ser en el Deportivo. Pero ha vuelto y nos alegramos mucho en casa de que la afición lo recibiera con tanto cariño".

Manu y Adorán Valerón, los sonrientes componentes de UD Las Palmas C (C. Torres)

Adorán, que juega en la media punta, también reconoce que "si había alguna duda sobre cómo iba a llegar se ha resuelto muy bien. Todo el mundo en Arguineguín está contento con este fichaje. Se habla muchísimo. Desde que se confirmó las muestras de afecto no paran; en las redes sociales se ha podido comprobar. Estuve en el Estadio el otro día y fue emocionante. Él también ha sentido este cariño, viene a darlo todo por la Unión Deportiva".

Manu ve a Juan Carlos "capacitado para liderar el proyecto de Las Palmas. Lo más importante es que siente ilusión por regresar al equipo y eso se va a notar en su juego. Está bien en lo futbolístico, le va a dar mucho juego a la Unión Deportiva". Adorán siente que "es muy bonito poder terminar tu carrera en el equipo que te vio nacer. Las circunstancias se dieron para su fichaje, pero lo más importante es que él se ve con fútbol en sus botas. Lo vamos a disfrutar todos, especialmente en Arguineguín. Para mí es complicado comentar la alegría tremenda que hay en nuestra familia, donde todos estamos muy unidos y se ha compartido esta decisión".

Adorán comprende que la gente "me compare mucho con Miguel Ángel. Eso siempre se ha comentado. Le vi jugar cuando era pequeño. El día de la lesión (frente al Barcelona, tras entrada de Ferrer) no estuve en el estadio. La gente me lo comentó más tarde. Fue una lástima. Muchas personas opinan que Miguel Ángel tenía tanto o más potencial que Juan Carlos para llegar lejos en el fútbol profesional. Nos quedamos sin saberlo". Manu "era muy pequeño ese día. No lo viví, pero sí he tenido oportunidad de ver imágenes de la jugada. Escalofriante".

El escudo del Abrisajac FC, siempre presente (C. Torres)

Ambos no saben explicar el por qué en la familia hay tan buenos futbolistas "y jugadores de ataque", recuerda. Manu encoge sus hombros. "No sé; es Arguineguín. Hay mucho fútbol, muchos niños jugando".

No serán los últimos; viene en camino para el juvenil un quinto Valerón: Adrián, hermano de Manuel. Un club familiar que vuelve a ser amarillo.

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