El extremo lanzaroteño gana presencia en el filial amarillo del que no esquiva la palabra ascenso como objetivo aunque "vivimos el momento de cada semana"
Manuel Borrego
El lanzaroteño Jordi Vidal (Arrecife, 7 de febrero de 1991) es una de las novedades de la presente temporada en Las Palmas Atlético. Dos lesiones y la buena competencia en la plantilla o la buena competencia y dos lesiones le han hecho no tener protagonismo que él esperaba. Pero en las últimas jornadas va abriéndose paso en el proyecto de un filial que encandila. El extremo maneja varias explicaciones sobre el sorprendente conjunto de Víctor Afonso y una de ellas está relacionada con el notable balance fuera de casa: "Eso ocurre porque, en mi opinión, en césped natural jugamos mejor al fútbol. Sólo hay dos campos con piso artificial en nuestro grupo, que corresponde al Anexo y al Puerta Bonita, precisamente. Y en los campos de la Península he visto al equipo muy suelto, con buen manejo de balón que se explota mejor en hierba natural".
Cuando le pedimos una valoración a Jordi sobre cuánto mejora Las Palmas Atlético en el cambio de superficie, su gesto evidencia un giro radical de la noche al día. "Nos favorece porque el juego del equipo es asociativo y porque además los rivales, cuando tienen la obligación como anfitrión, defienden más abiertos a cómo hemos visto que hacen en el Gran Canaria. Por eso creo que es buen balance nuestro en las visitas, que irán en aumento en el resto del campeonato".
La palabra sorpresa está en muchas de las opiniones que Jordi entrega a cada una de nuestras preguntas. Sorpresas por el nivel de juego encontrado, por la trayectoria de la Liga, por los resultados, por compañeros, ... casi por todo. Jordi es un jugador de banda formado en las categorías inferiores del Teguise hasta su paso al Real Madrid, cuando fichó en 2005. En la Casa Blanca estuvo ocho años formándose hasta que decidió irse y, cómo no, su epílogo también tuvo su propia sorpresa. "El club quería que me quedara, pero yo sentí que debía dar un salto desde el Real Madrid C. Y mi sorpresa fue que una vez que decido marcharme, el Real Madrid C compra plaza en la Segunda B. Esa es la única pena que me ha quedado. Lo demás desde entonces es abrirme camino a nivel profesional".
Y en su trayectoria se encuentra la UD Las Palmas. "Desde que Tonono -director de formación y captación de la entidad- me brindó la posibilidad de incorporarme a este proyecto, no lo dudé. Sabía que no iba a ser fácil encontrar mi papel en el equipo, pero los contratiempos de mis lesiones iniciales me han condicionado". Una de ellas, la segunda, se debe precisamente "al cambio de superficie y al del calzado. Eso también fue una desagradable sorpresa".
"Somos sólidos; ahí empieza todo"
Jordi analiza como entrenador los conceptos futbolísticos que mantienen muy alto al filial amarillo. "Lo primero que he de decir es que somos muy sólidos en defensa. En eso se basa nuestro potencial. A los equipos les cuesta hacer un gol. Pero eso es un trabajo de todo el equipo. Que a estas alturas de la temporada nuestros centrales no acumulen tarjetas da a entender cómo es el trabajo de los demás para que se origine tanta seguridad".
A la derecha, Enrique Castaño con Jordi Vidal, dos ex futbolistas de filiales del Real Madrid en UD Las Palmas (C. Torres)
El lanzaroteño no oculta la cobertura de sus expectativas porque "más allá de la dureza del grupo, estamos hablando de un equipo filial cuyos jugadores, en un porcentaje importante, también están debutando en la categoría. Mi papel en el grupo es coger ritmo e intentar aprovechar al máximo todas las oportunidades que me brinde el entrenador".
El pasado fin de semana incluso él mismo acarició el gol, con motivo de la visita al rocoso Fuenlabrada. "Todavía no estoy en plenitud de mi juego, por las circunstancias de las que ya he hablado. Aún no me he podido mostrar y es lógico que la gente no me conozca bien cómo es mi estilo. Soy un futbolista vertical, al que le gusta la velocidad y llegadas. Trato de ser asociativo. Puede ser Artiles como referencia; ese tipo de jugador".
Roque Mesa, Héctor y Medina
Hay compañeros que Vidal desconocía y que le están llamando la atención en este tramo de catorce encuentros de la fase regular: Razona la respuesta cuando le preguntados. "Me ha agradado mucho Roque Mesa, por la manera en que hace dinámico el juego y además cómo es capaz de sostener el centro del campo del equipo. También desconocía la importancia ante el gol de Héctor Figueroa, que llegó el pasado invierno ha marcado una buena cifra de goles desde entonces. Destaco también al zurdo Medina; por su proyección en el juego de banda. Se ha transformado en un especialista".
Pasado el primer tercio de la competición hay palabras tabúes en el vestuario del filial que, poco a poco, están apareciendo en algún subrayado. Una de ellas es 'ascenso'. Jordi no rehúye de ella. "Sabemos que podemos pero no es nuestro objetivo inicial. Lo primero que se habló fue de salvar la categoría pero el equipo está muy serio y, si mantenemos esta línea, se hablaría mucho de él. Pero es algo que no está en nuestras manos, porque dependemos de lo que haga la primera plantilla. Si nosotros lográsemos ese derecho a la liguilla pero no se materializa porque el primer equipo no logra el suyo, entonces podría acabar siendo un problema incómodo para los de arriba. Lo digo por los comentarios que podría generar".
Jordi espera más de equipos como "el Huesca, Toledo o Baracaldo, que son mis otros candidatos a la promoción". Pero ve a Las Palmas Atlético "muy por encima de otros filiales. Si acaso Bilbao Athletic y Getafe podrían estar también ahí. No será nada fácil, pero nosotros estamos capacitados para liderar el grupo hasta el final. Ese es trabajo de todo el equipo". Aún con ello, "vivimos el momento, el partido en el que estamos cada semana. La ilusión de todos los futbolistas es dar el salto al primer equipo o, de lo contrario, si no tenemos cabida en la UD Las Palmas poder salir hacia otros destinos".
A la derecha, Jordi Vidal y Jesús Valentín realizan los estiramientos tras la sesión matinal en el Anexo (C. Torres)
La última de las sorpresas de Jordi Vidal es global. "El trabajo que se realiza con el filial es muy bueno. Tenemos un cuerpo técnico que posee las ideas claras y los jugadores están muy unidos e implicados. Mis temores en la salida de la Liga era conocer cómo íbamos a competir con un equipo que apenas conocía la compleja Segunda B. Pero desde el principio, desde que llegamos, todo ha ido sorpresa tras sorpresa".
