Desde sus orígenes, las plantillas de la UD Las Palmas estuvieron compuestas por sagas de hermanos; los Figueroa son ahora la última referencia
Manuel Borrego
Una decena de hermanos, a través de la historia de la UD Las Palmas, han sido compañeros en las plantillas profesionales del representativo grancanario. Los últimos de la lista serán los Figueroa, cuyo padre Momo, también estuvo en la cadena de filiales, mientras el tercero de la saga David -ahora en el Villa de Santa Brígida- llegó a jugar en el primer equipo del club a las órdenes de Josip Visnjic, en la temporada 2005-06 de Segunda B.
De esa lista, fue en la pasada temporada cuando el equipo grancanario lograba unir en una misma plantilla un hecho singular: dos parejas de gemelos, los Castellano o los Suárez, algo inédito en el fútbol canario hasta el momento. Este hecho quedó disuelto porque Sergio y Francis Suárez causaron baja al finalizar la pasada temporada. Ambos podrían coincidir en breve en la Premier de Tailandia. Sergio en el Police United y Francis, aún por definir.
Hermanos, desde 1949-50
Alex Castro señala la fotografía de los tres hermanos: él, con brazalete, junto a Rubén y Guillermo (C. Torres)
Los primeros hermanos en jugar juntos en la UD Las Palmas fueron Manolín y Tatono Santana, en la temporada 1949-50, como miembros de la plantilla fundaciona. Su primera actuación conjunta se remonta al 16 de octubre de 1948, frente al Real Hespérides de La Laguna (4-1), en la Liga extraoficial, camino de la Segunda División.
Ignacio Jorgellegó medio año después para unirse a su hermano Antonio Jorge(el hijo de éste, de igual nombre, también llegaría a la UD en los años setenta). Los dos dúos de hermanos continuaron juntos hasta la Primera División. Tatono y Manolín disputaron el histórico encuentro del 8 de julio de 1951 frente al Málaga (4-1), anotando Manolín uno de los tantos, con el que Las Palmas lograba su primer billete a la máxima categoría y juntos estuvieron el 9 de septiembre de 1951 el primer encuentro de los amarillos en Primera División, con la derrota 1-4 frente al Real Madrid. La lista la continuaron Pantaleón Quevedo (fichado en 1949), quien precedió a Manolo.
De entre las célebres sagas familiares figura la del central internacional Paco Castellano, quien precedería a su hermano Fernando. Y más tarde al hijo del primero, Pachi, hoy integrado en el cuerpo técnico del conjunto de la División de Honor juvenil.
De Guanarteme llegaron al equipo, años después, Pepe Juan y Julio Suárez, en una etapa en la que ambos eran dos prometedores jugadores de la cantera de distintas promociones. En los años ochenta el turno le llegaría a los hermanos galdenses Sigfrido y Onofre, al igual que más tarde lo hicieron desde la cadena filial Alberto y José Luis Padrón, dos defensores especialistas en marcajes. El segundo es ahora ayudante de Víctor Afonso en el líder del grupo II de la Segunda B.
Los gemelos Francis y Javier Hernández iniciaron el camino que luego siguió el pequeño Alberto.Todos, sobrinos del que fuera eficiente lateral de la UD y capitán del equipo en la final de Copa del Rey de 1978, Guillermo Hernández. Antes Miguel Ángel y Juan Carlos Valerón estuvieron juntos en Segunda A, antes de la marcha de ambos al Mallorca; ahora en filiales también está el sobrino de la casa, Manu Valerón.
El único trío de jugadores hermanos que llegó a lucir en varios encuentros la elástica amarilla fue el integrado por Álex, Guillermo y Rubén Castro, durante la temporada 2003-04.
Los últimos dúos de hermanos que llegaron al primer equipo, aunque en distintas etapas, fueron David y Adrián Martín, además de Momo y David Figueroa (más tarde lo hará Héctor), además de los mencionados gemelos Suárez y Castellano, en orden cronológico.