B.P.

El presidente de la UD Las Palmas, Miguel Ángel Ramírez, habló este lunes en la emisora del club representativo grancanario para aclarar los motivos del por qué la entidad no emitía una campaña de promoción especial de cara al encuentro del próximo domingo frente al Sporting (11.00 horas, en directo por Canal Plus). Reconoció que algunos aficionados habían pedido esta iniciativa y también que abonados de la entidad reclamaban que "por respeto a ellos" se mantuviera todo en la situación actual. "Tenemos un déficit importantísimo en el presupuesto de ingresos", reconoció localizando el desfase en la captación económica en los conceptos de abonos y taquilla de la vigente campaña.

"Quien tiene que hacer gestos es la propia plantilla", manifestó para descubrir que la bonanza clasificatoria tiene un reflejo paralelo en los graderíos del Estadio de Gran Canaria. El riesgo que asume la entidad se afrontaría en la próxima campaña, según argumentó el presidente. "No hay peligro para que la UD Las Palmas pueda competir el próximo año en Segunda División, si no logramos el ascenso. El problema lo resolveremos con imaginación. El riesgo es que si en vez de tres millones de euros hacemos en realidad uno y medio en conceptos de abonos y taquilla, la Liga no nos permitirá el año próximo un presupuesto mayor de ingresos de esta nueva realidad", explicó. De ahí que "saldríamos a competir pero ya veremos qué tipo de plantilla se confecciona".

No obstante, el titular del consejo de administración expresó su alegría por "la trayectoria del equipo. Estamos muy ilusionados con la marcha y queremos compartirlo y disfrutar de este momento con los aficionados". Sin embargo, "yo no disfrute plenamente este momento, porque las obligaciones económicas me lo impiden (...) como administradores del club tenemos una responsabilidad que asumir y respondemos ante ellas".

Avanzó que el derbi con el Tenerife, previsto el 11 de mayo, será Día del Club "como ya es tradicional" y que en partidos como local, la entidad propondrá sus Día del abonado, para que éstos puedan adquirir localidades de oferta. "Son los que tienen derecho a exigirnos porque son los que siempre están al lado del equipo. Eso no le puede molestar a nadie", aclaró.

"Nuestra economía siempre ha estado deteriorada", en alusión a la salida de su consejo de administración con una deuda de 72 millones de euros. "Pero siempre aportamos soluciones en forma de dinero. El club sigue vivo por ello". Sin embargo, a pesar de estas dificultades financiera, "año a año se nos exige cada vez más, que tengamos un equipo más competitivo para lograr el ascenso". Por todo ello, "si no subimos, la situación actual puede ser insostenible. Porque además tenemos que afrontar sentencias como las del Deportivo y vivir con la espada de Damocles que nos proporcionan los embargos del expresidente García Navarro".

Anunció en UDRadio que en los próximos días, el club iba a hacer un esfuerzo económico para actualizar nóminas de sus profesionales (no sólo los deportivos).  "Este consejo paga anualmente más de 2.5 millones de euros de deudas que no hemos generado. Y pregunto: ¿si no tuviésemos esa rémora, qué equipo tendríamos?". Ramírez también recordó que en la nómina de la plantilla 2013-14, que es de cinco millones de euros, está incluida la de los equipo filial, que sigue ocupando plaza de promoción en la Segunda División B.