T.A.

(Texto actualizado). La directiva de la UD Vecindario comunicó este jueves a su plantilla, a través del capitán Yeray López, que el equipo de Santa Lucía no acudirá el próximo fin de semana a su partido frente al Cotillo, en Fuerteventura, previsto para las 12.00 horas del domingo. Esta es una nueva oleada de la crisis que acusa el club de Santa Lucía, a quien la agencia de viajes ya no le concedería crédito económico para la obtención de los billetes. La decisión le fue trasladada al capitán vía mensaje telefónico y este llevó a cabo el resto de la divulgación con sus compañeros de vestuarios. "A esto no se le puede considerar equipo de fútbol ni nada. Es una situación muy desagradable. Es muy triste pero es lo que toca. Esta situación se ha vuelto extrema", declaraba el propio Yeray Lópeza Radio Tagoror.

Si el Vecindario consuma la incomparecencia en el partido de la trigésimo tercera jornada habría utilizado la última bala para poder salvar la categoría esta temporada, tal es el empeño de los jugadores y técnico que se mantienen en el club del Sureste en una etapa especialmente delicada tras la marcha del hombre fuerte de su directiva, Santiago Ledesma, hace unas jornadas.

La gravedad del asunto es innegable porque pone en riesgo incluso su futuro. El Vecindario solo puede cometer un acto de no presentarse en un partido oficial cuando aún le restan tres salidas más: Lanzarote, Ibarra y Realejos. Porque la segunda incomparecencia le conllevaría la exclusión de la competición pasando a ser el último clasificado el grupo, y puesto de descenso, con cero puntos.

Si no acude a jugar con el Cotillo, el código disciplinario vigente por la Real Federación Española de Fútbol establece la pérdida del partido por 3-0, además de la resta de tres puntos en la clasificación. Así lo recoge textualmente: "Tratándose de una competición por puntos, se computará el encuentro por perdido al infractor, descontándole, además, tres puntos en su clasificación, declarando vencedor al oponente, por el tanteo de tres goles a cero.

En el supuesto de una segunda incomparecencia en la misma temporada, o de retirada de la competición, el culpable será excluido de la competición, con los efectos siguientes:

a) Siendo la competición por puntos, se respetarán todas las puntuaciones obtenidas por los demás clubs hasta el momento, y en el resto de los encuentros a celebrar se dará por vencedor a los oponentes por el resultado de la media de los goles encajados por el equipo excluido.

b) Si lo fuere en la segunda vuelta, se aplicará idéntica norma en relación con los partidos correspondientes a ésta, pero respetándose todas las puntuaciones conseguidas en el transcurso de la primera.

c) El club así excluido quedará adscrito al término de la temporada a la división inmediatamente inferior, -computándose entre las plazas previstas para el descenso en las bases de la competición-, sin derecho a ascender hasta transcurrida una más, y si al consumarse la infracción estuviera virtualmente descendido, a la inmediatamente siguiente".

Multa hasta 3.000 euros

Y, al margen de ello, la Federación le impondrá una multa de "hasta 3.000 euros cuando el equipo se encuentre adscrito a Tercera División", como es el caso del que protagoniza esta ausencia en la competición.

El Vecindario se encuentra actualmente ubicado en mitad de la tabla (42), a trece puntos de los puestos de descenso (29). Pero acontecimientos extradeportivos como los comentados puede dar al traste el trabajo de toda la temporada. En una semana tendrá que viajar a Lanzarote, para rendir visita al titular de la capital conejera.