M.B.

Los números, el algodón de la Liga, muestran su lado más cruel este lunes al evaluar las consecuencias de la derrota sufrida en Valdebebas por la UD Las Palmas. Los tres puntos malogrados frente al Castilla, en unión al empate entre Deportivo y Éibar -aumentan la desventaja un peldaño más mientras se reduce una jornada para el fin de la fase regular- hacen peligrar de forma clara las posibilidades para que el equipo de Sergio Lobera pueda llegar a la Primera División por la vía directa tras la fase regular. La síntesis es la siguiente:

Las Palmas reduce al 22'2% sus posibilidades de rebasar al Éibar en los tres partidos finales y deja en el 3'8% las opciones de hacerlo con el Deportivo de La Coruña.

Para calibrar estos porcentajes hemos tenido en cuenta que Las Palmas (60 puntos) es el equipo de referencia para arrebatar el puesto de privilegio a Deportivo (66 puntos) y/o Éibar (64). Esta premisa es la que da salida a las 27 combinaciones de cada uno de los tres conjuntos implicados en este supuesto reparto del podio de Segunda División. Hay que tener también en cuenta que los jugadores de Sergio Lobera necesitan un punto más para salvar la barrera del Éibar (1-1 en el Gran Canaria y derrota amarilla en Ipurúa 1-0), al igual que con el Deportivo (0-1 en Gran Canaria y 1-2 en Riazor), en este último caso beneficiado el equipo gallego por el golaveraje general (+14 frente a +3).

Estos son los requisitos para el ascenso directo de la UD:

• Que el Éibar no supere 4 puntos y que Las Palmas pueda añadir 9 puntos (tres victorias), 7, 6 o 5 puntos.

En este caso se dan 166 posibilidades de un total de 729 combinaciones de resultados entre los dos equipos. El principal problema es que el Éibar obliga a Las Palmas a reducir prácticamente a cero su margen de error. Los armeros reciben en casa de forma consecutiva a Alavés (en zona de descenso) y Lugo, para terminar frente a los casi vecinos del Numancia, en Soria.

• Que el Deportivo no supere 2 puntos y Las Palmas enlace tres victorias o 7 puntos

Si la opción de sobrepasar el Éibar es muy compleja (no imposible), rebasar al líder Deportivo es prácticamente una quimera. Al conjunto de Fernando Vázquez le vale ahora una victoria en tres partidos para cerrar la competición con el ascenso directo (visita al Numancia, recibe al Jaén y despide la Liga en Girona). Las Palmas es el único equipo que le amenaza y que sólo le puede superar en 28 combinaciones de resultados de un total de 729: el 3,8% de las posibilidades. Y todas ellas pasan porque el conjunto de Lobera gane sus tres partidos o sume siete puntos, errores múltiples del Deportivo al margen

* Para ser campeón, el 0,6%

Todavía el panorama se presenta peor si se tratara de acabar la Liga como campeón de la Segunda División, como la UD Las Palmas realizó en ascensos precedentes. En esta hipótesis sólo 126 resultados de 19.683 combinaciones respaldan a los amarillos, reduciéndose al 0,64% la posibilidad de llevar otro trofeo a las vitrinas del club. De cualquier forma, visto lo visto, este hecho no es relevante.

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Ni en dobles, triple o cuádruples empate

Las Palmas, como hemos dicho, tiene perdido el parcial con Éibar (4 puntos del equipo armero) y el Deportivo (acuden al golaveraje general: 14 a 3 a favor gallego antes de las tres jornadas). No le vale al equipo grancanario, pues, el emparejamiento clasificación.

A la derecha, William marca el 1-1 sin oposición (Liga Profesional)

Tampoco puede aferrarse Las Palmas a la hipótesis del triple empate con Deportivo y Éibar que se consolidaría si los tres equipos combinan sus resultados para encontrarse con 66 puntos, 67 puntos o 69 puntos. Éibar sumó 8 puntos en sus cruces con gallegos y canarios; sería el campeón, mientras Depor y Las Palmas tienen 4 puntos y -1 en el golaveraje del trío. No obstante, estos se presenta muy remota.

En un cuádruple empate, incluyendo al Barcelona B, la situación de Las Palmas empeoraría porque suma 3 puntos ante el filial azulgrana; sin embargo Éibar y Deportivo añaden 4.

La pelea de Las Palmas, con independencia de los dos equipos que le preceden en la clasificación (el Barça B no cuenta por su condición de filial) ha de centrarse en primer término en consolidar el primer puesto de la promoción, que lleva implícita la posibilidad de jugar el último partido en el Estadio de Gran Canaria. Aunque puede arrojar la toalla porque, como suelen comentar los mismos protagonistas, las estadísticas están para romperlas.