Las Palmas fue un equipo timorato en defensa y romo en ataque; el efecto Josico no funcionó en el penúltimo encuentro de la temporada regular por lo que los amarillos se jugarán el billete a la promoción a una carta y en la última jornada
Manuel Borrego
No funcionó el efecto Josico, al menos en primera instancia. La UD Las Palmas encadenó su tercera derrota consecutiva en un tramo cumbre de la temporada, sin dar sensaciones de recuperar el potencial que ha mostrado de forma transitoria a lo largo de la Liga y cuando ya está tan próxima las decisiones del campeonato. El relevo de Lobera no se tradujo en la conquista de los puntos que habrían consolidado la tercera posición antes de la última jornada. El representativo grancanario fue un equipo timorato en defensa, previsible en su juego horizontal y romo en ataque, datos alarmantes a estas alturas del calendario. Su objetivo, tras el 2-0 en Son Moix, pasa ahora a consolidar en la última el billete para repetir intento de asalto a Primera a través de la promoción. Su clasificación final lo definirá el resultado ante la Ponferradina si bien esta vez cayó dos puestos teóricos en la tabla. Duro castigo.
Las Palmas ya fue reflejo en la primera parte de lo que había sucedido en los partidos anteriores. No tuvo la tranquilidad cuando su rival controlaba el balón y los criterios para avanzar metros quedaban cercenados por la ausencia de remates. En realidad, el portero Aoute regresó a vestuario sin romper a sudar porque salvo un disparo lejano de Ángel, que se perdió lejos de la portería, los amarillos se ausentaron de esmerarse en la búsqueda del gol.
La obsesión grancanaria estuvo en contener a un Mallorca que se jugaba la vida en el partido y que fraguó sus mejores acciones con la pizarra como herramiento. Fruto de ello, Agus proporcionó un susto de proporciones notables cuando, a los 16 minutos, cabeceó al larguero el corner botado por Martí. Los problemas de Las Palmas en este tiipo de acciones eran abundantes, incluso en las segundas jugadas donde el Mallorca siempre ganaba la posesión. Pero el conjunto balear tampoco había mostrado la pegada del ganador en esta etapa de amplio desgaste para los dos conjuntos.
Sin embargo, en quince minutos iba a reventarse el encuentro. El primero de los goles baleares, ¡cómo! no, se producía a balón parado, en otro nuevo córner de Martí que cabeceó con éxito en solitario Nsue. Y apenas unos minutos después, una pérdida de balón en el centro del campo genera la ocasión de Hemed que goza de un instante de fortuna al pasar el balón bajo el cuerpo de Barbosa.
No había noticias del candidato UD, cuyo fútbol estaba herido porque carecía de profundidad y movimientos verticales. Todo se generaba en horizontal y al pie de un compañero haciendo muy complicadas las maniobras de aproximación en el marcador. Las Palmas se despidió del encuentrro sin encontrar el gol que le diera esperanzas aunque lo intentó todo hasta el último minuto, gozando entonces de algunas oportunidades que no fraguaron.
Alineaciones:
Real Mallorca:Aoute, Ximo, Nunes (Kevin, 21), Agus, Bigas, Nsue (Brandon, 51), Martí, Thomas, Alfaro (Iriney, 75), Alex Moreno y Hemed
UD Las Palmas:Barbosa, Galán (Valerón, 65), David García, Aythami Artiles, Ángel López, Javi Castellano, Apoño, Momo, Nauzet, Aranda y Mayor (Chrisantus, 58)
Goles:1-0, m. 47. Corner que saca Martí y cabecea en el segundo poste Nsue. 2-0, m. 60. Hemed cierra una jugada personal, tras pérdida de balón de Apoño
Arbitro:Arcediano Monescillo (Castellano-Manchego). Tarjetas amarillas a Agus, Kevin y Thomas (Malloca), David García y Apoño (Las Palmas).
Pormenores.Estadio de Son Moix. A pesar de que el club balear regaló entradas para cubrir las 23.000 plazas de su estadio, no hubo lleno para el encuentro de la jornada 41. El jugador descartado por Josico fue Hernán.