M.B.

Adivinó Josico Moreno la trascendencia que iba a tener el juego de estrategia en el partido de este sábado, en Son Moix. Sin embargo sus jugadores no pudieron contenerla. Lo mejor del Mallorca ya había llegado a balón parado y a través de los corners lanzados por Martí. Todos ellos se realizaron al primer poste o al centro del área, con el susto en el minuto 16 de un cabezazo de Agus al larguero.

De ello no aprendió Las Palmas, sí el Mallorca. En la segunda parte se produjo un cambio en uno de los lanzamientos. Y empleó el conjunto bermellón como refuerzo a su estrategia un bloqueo simple en el borde del área pequeña, que tenía como objetivo impedir los movimientos de salida de Barbosa. Martí hizo la señal, varios de sus compañeros amagaron la carrera al primer poste arrastrando con ellos a los zagueros de la UD Las Palmas mientras Nsue hizo un rodeo para abordar el remate en el segundo poste. El balón voló sobre las cabezas de los futbolistas que se encontraban en el área y Barbosa tropezó con el muro que le habían fabricado. Resultó suficiente: Nsue llegó antes al balón que Nauzet Alemán y su remate de cabeza a gol resultó casi limpio.

El meta argentino protestó por inercia, pero era su propio compañero el que en primera persona le impedía alcanzar el balón.

En el 1-0, el Mallorca necesitó cinco rematadores posibles contra ocho defensores en la zona de conflicto. A partir de ahí, el partido ya fue suyo.