B.P.

Ocho mil kilómetros separan ahora a los hermanos Suárez Artega: Francis, en Turku (Finlandia) y Sergio, en Bangkok (Tailandia). Es la primera vez que están tan lejos el uno del otro a nivel profesional. Sergio fue el primero en hacer las maletas para incorporarse a comienzos de 2014 al Police United; Francis debutó hace unos días con el Inter Turku, ambos en la máxima categoría de esos países. El neroazurri (Inter Turku está inspirado en el Inter de Milán de los años noventa) lo hizo con un gol en un derbi local. Llevaba prestado el número 2 a su espalda, aunque desde ya posee el 18 con el que espera hacer magia (cosa de familia) en suelo finés durante el resto de la actual temporada.

Habla Francis de sus sensaciones a Tinta Amarilla, cuando ya está futbolísticamente instalado en destino: "Una vez que llegué aquí me sorprendió la ciudad, me gustó .. Y quedé complacido por el trato que me ha dispensado el club y la totalidad de mis nuevos compañeros. Consiguieron enseguida introducirme en el grupo y, desde el primer día, me he sentido uno más del equipo. Todo ello, incluida la oferta que me realizaban, hizo que no dudara un segundo en quedarme. Estoy muy contento con esta decisión".

Francis está alucinando con algunas cosas nuevas en su vida. Una de ellas es el sol estival en la noche ártica. Comparte imágenes con sus amigos mostrando una calle luminosa a las 23.30 horas del día. Todo es nuevo para él, pero lo profesional es lo que impera en estos momentos: "Todas las personas de mi nuevo club están superatentos a los jugadores, para que en todo sienta comodidad en la ciudad. El Inter se ha volcado conmigo y su manera de realizarlo confieso que me ha impresionado. Intentaré devolverles esta confianza".

En tan poco tiempo, el gemelo grancanario ha disfrutado de muchas sensaciones. Una de ellas fue marcar el gol del empate. La jugada se originó por la derecha y Francis apareció como centrodelantero, marcando a bote pronto desde el borde del área pequeña: "Fue muy bonito poder marcar en mi debut y en ese partido. Resultó para mí un momento especial. Llevaba mucho tiempo sin jugar y he de admitir que un futbolista lo pasa mal. Porque uno se acostumbra cada fin de semana a prepararse para la competición; no poder hacerlo durante tantos meses hace que lo atravieses malos momentos. Para mí esa etapa ha quedado atrás y ahora estoy muy contento volviendo a jugar. Por eso hago mi agradecimiento público a los dirigentes del Inter, que me han dado esta oportunidad de volver a jugar. Y, por supuesto, me acordé de alguien (?) cuando marqué el pasado fin de semana".

Sobre Turku (que en finés significa mercado porque lo fue como enclave con conexiones marítimas) no ha tenido mucho tiempo de profundizar en ella. "Mis compañeros me han explicado lo justo, quizá también porque aún hay distancias con el idioma. El club me ha asignado una profesora para mejorar el inglés. La ciudad es muy bonita, bastante grande. Me ha sorprendido que la mayoría de las personas se desplazan en bicicleta. Hay bicis por todas partes" (..) "De momento lo mejor que llevo es entrenar y jugar. Y se echa mucho de menos a la familia y amigos. Por eso cuando estoy con mi trabajo lo llevo mejor".

Francis espera hacer camino en un fútbol donde se convierte en pionero para los jugadores de nuestra tierra.

8.000 kilómetros de distancia entre los gemelos grancanarios (TA)