Hubo debate en Boca Juniors. Luciano Acosta es el heredero de un dorsal diez que tiene una potente carga emocional en el club xeneize. Lo llevó Maradona ... hasta Riquelme. La marcha de este último generó esa incógnita. En la UD Las Palmas, el número diez de las últimas temporadas está pasando por ser el dorsal menos estable del equipo. Lo ha elegido, al menos en su primera actuación, un admirador personal y ex compañero de Riquelme: Sergio Araujo. Sus últimos inquilinos no recibieron el respaldo de la comisión deportiva para mantenerse más tiempo con él. Darino (2009-10), Jorge Larena (10-11), David González (11-13) y, por último, Antonio Apoño (14-15). La pasada temporada fue el dorsal que quedó vacante hasta el final porque cada uno de los integrantes de la plantilla pareció eludirlo. ¿Podrá Araujo cerrar ese grifo?.