B.P.

"Yo cuento con Benja. No me hago un planteamiento de su salida en el mercado invernal. Es una idea que tenemos los técnicos y la comisión deportiva", confesó Paco Herrera apenas hace veinticuatro horas, al valorar la situación del delantero-refuerzo de la pasada mitad de Liga, que precisamente tuvo un pasado notable en el Girona, próximo rival de los amarillos. Benja atraviesa su propia travesía desde el 24 de febrero de 2013 cuando en Montilivi, cuando en partido frente al Córdoba -escudo que también conoce- resultó lesionado en una rodilla que está resultando su calvario personal.

El jugador nacido en Tarrasa (23 de agosto de 1987) fue una apuesta a largo plazo de la UD Las Palmas hace casi un año. Porque llegó a la isla, avalado por Sergio Lobera, cuando estaba aún en periodo de recuperación y desde entonces reconocía que su prioridad era recuperar el estado de forma óptimo que le permitiera ayudar a su nuevo equipo. Heredaba entonces el dorsal 8 de Tato y, en las previsiones sobre su recuperación, Benja estaría disponible para el final de la pasada Liga o, en situación de mayor optimismo, a pleno rendimiento en el vigente campeonato. Pero las piezas no se han logrado encajar como él y los actuales responsables del equipo habrían querido.

En el pasado campeonato, ocupó 63 minutos en la Liga en parciales de cuatro encuentro. Anotó un gol (al Real Madrid Castilla, en el estadio Alfredo Di Stéfano) y estuvo siete partidos más en el banquillo.

El único refuerzo exterior que permaneció

La primera parte de su plan de recuperación se había cubierto de alguna manera, porque todo parecía ir sobre ruedas en el aspecto físico. Y tal era el buen concepto general que sus cualidades futbolísticas despiertan que Benja fue, grancanarios Valerón, Aythami Artiles y Ángel López al margen, el único refuerzo de la pasada Liga en UD Las Palmas que permaneció en plantilla. Los restantes (Masoud, Aranda, Apoño, Delev, Xabi Castillo, Mayor y Galán) terminaron o rescindieron contratos por diversos motivos, todos relacionados con asuntos deportivos.

Pero no Benja, que durante la pretemporada de 2014 comenzaba a pisar fuerte en los planes de Paco Herrera. De hecho, fue el primer relevo atacante de banquillo en la apertura de la Liga, frente al Llagostera, donde acumuló sus últimos 12 minutos. Pero en vísperas del partido frente al CD Tenerife, Benja ha vuelto a resentirse sin lograr estabilizar su rendimiento. Y desde entonces su panorama se oscureció.

Este viernes, la UD Las Palmas confirmaba que el jugador vuelve al punto de partida. Eleva consultas en Barcelona: "Benja viaja a Barcelona", confirmaba el club. "Se ha sometido en las últimas semanas a varias pruebas radiológicas en el Hospital Perpetuo Socorro, debido a las molestias que viene padeciendo en la rodilla izquierda. Dado que no ha habido mejoría con el tratamiento, se ha recomendado por parte del jefe de los servicios médico del club, Gerardo Garcés, que acuda a la consulta en Barcelona de Ramón Cugat, médico especializado es traumatología, cirugía ortopédica y experto en lesiones de rodilla, para una nueva valoración. Cugat llevó a cabo la intervención quirúrgica de Benja en la temporada 2012 / 2013, cuando siendo jugador del Girona tuvo una grave lesión de rodilla".

El 27 de febrero de 2013, el doctor Ramón Cugat le operó en Barcelona de la rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Desde entonces, Benja lucha por volver a ser el hombre que despuntaba en el Girona y que trata de encontrarse en la UD Las Palmas.