Así es el espíritu de Juan Espino: aventurero. Este miércoles, camino del estadio para el Mundial de kabaddi, no lo pudo resistir. No viajó con sus compañeros de la selección en la guagua: lo hizo con la escolta policial, sentado entre los militares, recorriendo en un vehículo de pequeñas dimensiones las calles punjabíes. Si no lo hiciera, no sería Juan. Quizá con él, la propia policía, iría más segura también ...
No lo pudo resistir
10/12/2014
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