1.500 fanáticos del deporte extremo participan este sábado en la primera edición de la Bestial Race. El circuito organizado en La Ballena se llenó de rampas, saltos, escaladas, barro, neumáticos, ... para deleite de los entusiasmados deportistas
M.B.
Aquello se convertía en una prueba que desataba el humor del viejo profe Leoncio Castellano, otrora entrenador ilustre del balonmano en Gran Canaria. Era el responsable de la Educación Física del Instituto Alonso Quesada, residencia cuyo antiguo balcón miraba de frente al Barranco de la Ballena. Leoncio observaba a sus alumnos y con su voz autoritaria les invitaba: "¡A dar la vuelta al Mundo!". Aquello consistía en un auténtico calvario, un rompepiernas. Subidas y bajadas en zona de una superficie polvorienta, llena de piedras y todo tipo de obstáculos, tanto los naturales como los depositados por una irrespetuosa humanidad. Dar la vuelta al Mundo era un reto y una exigencia.
Lejos estaba de pensar el viejo profe que aquella idea suya, a regañadientes acatada por los pupilos, iba a convertirse en 2014 en una carrera pasional. La vuelta se ha convertido en una idea más sofisticada, desarrollada en un circuito que hoy recorre parte del caos de La Ballena, en la zona de los campos de fútbol ya abandonados y de aspecto en demolición. Rampas, saltos, escaladas, zona de neumáticos, barro, agua, ascenso a un roque de contanier, ... Todos estos elementos fueron barreras a sobrepasar por más de 1.500 apasionados del deporte extremo, venidos algunos de distintas islas y otros de la capital y municipios de Gran Canaria. La organización se ha visto desbordada por esta primera edición ha alcanzado los 1.500 inscritos, cuando la idea original era que 500 cubrieran hasta los 12 kilómetros de exigente circuito en pleno corazón de la ciudad.
Llegar a la meta era el premio invisible para los corredores de la primera edición de la Bestial Race, que convirtieron el sábado soleado de Gran Canaria en una maravillosa jornada de esfuerzos individuales para conocer sus propios límites físicos. Verles competir, algunos con el ánimo de sólo experimentar la carrera, era también agotador. Habrá agujetas tras el fin de semana. Y también la sonrisa del que se ha vencido a sí mismo en tan dura prueba.
Aday López fue el ganador absoluto de la prueba, seguido de Antonio David Pérez y Raúl Esclarín. La primera fémina fue Estefanía Noble.
Reportaje gráfico: C. Torres