M.B.

Es una alegría saber que Jorge Larena-Avellaneda, un año después, vuelve a marcar (vídeos asociados). El centrocampista grancanario (33) ejerce en su primera temporada en la pasional liga chipriota en las filas del AEK Larnaca. Y las cosas le van sobre ruedas porque "hemos recuperado aquí el ambiente isleño que echábamos de menos en Gran Canaria. Estoy con mi familia muy bien y, ahora, encima en la racha del gol". En los dos últimos encuentros ha mojado Jorge con su nuevo equipo; dos tantos importantes y de bella ejecución, con disparos característicos suyos. "Fueron goles frente a los dos equipos más importantes de la pasada Liga, como son Apolón y Apoel. Las cosas están saliendo como esperábamos en una plantilla donde hay muchos españoles y nos sentimos muy identificados. La adaptación al equipo, al fútbol chipriota y a mi nueva ubicación ha sido rápida y eficiente".

Jorge acudió a esta experiencia internacional luego de resolver en el verano su contrato con el Recreativo de Huelva tras "una pretemporada que ya había sido muy extraña". Tomó una decisión que, a la vista del tiempo, fue acertada porque los problemas del Decano van a aumento y él conoce la complicada situación interna de sus otrora compañeros. "El club estaba fichando jugadores que quizá el cuerpo técnico no había solicitado. Y se generó una situación de overbooking tras la que yo tuve que valorar mi marcha. No se han hecho las cosas bien y soy consciente de que mis compañeros lo están pasando ahora realmente mal en el aspecto económico. Este tipo de cosas puede acabar influyendo en el equipo, a pesar de que el Recreativo había empezado bien la competición. Me debe dinero pero lo tengo bien atado", añade.

En el AEK, Jorge está rodeado de profesionales compatriotas reconocidos como el portero Toño, además de Catalá, Ander Murillo, Massana, Juanma Ortiz o su ex compañero en el RC Celta, Joan Tomás. "Y nuestro técnico también es español, Tomás Christiansen", el ex jugador formado en el FC Barcelona.

"Se están haciendo muchas cosas bien en la Unión Deportiva"

Jorge sigue desde la distancia todo cuanto acontece al equipo que lleva en el corazón. "He visto muchos partidos de la Unión Deportiva Las Palmas esta temporada. Me hago cargo del momento que se está viviendo. Creo que el club, su plantilla, la afición y todo el entorno se merece una gran alegría. Se están haciendo muchas cosas bien y los resultados están a la vista. La última vez que estuve en el Estadio de Gran Canaria", continúa, "fue para aquel fatídico día del Córdoba en la promoción de ascenso. Pero creo que el equipo ha tenido la virtud de levantarse con más fuerza y hacer de aquello un arma para esta temporada. Le veo fuerte y ojalá al final podamos todos celebrar ese ascenso".

Porque, además, Jorge goza de un hecho singular en la historia de la Unión Deportiva. Fue debutante el día de un tránsito de Segunda a Primera División, con Sergio Kresic al frente del equipo (2000). "Estoy viendo, además, que le han metido mano a las pistas del Estadio de Gran Canaria. Esa es una gran noticia, la mejor que podíamos esperar, porque por fin vamos a tener de nuevo un campo de fútbol. El equipo lo va a agradecer. Pero, dime, ¿cómo son las distancias?", ... (le explicamos). "Pues si se logra situarlas de forma parecida al Estadio Insular, entonces podría volver a ser un estadio ideal para el equipo".

Pero él vive ahora su momento: "Le he podido dedicar por fin un gol a mi pequeña Ella. Ya lo había hecho antes con Aarón, mi hijo. Espero más", sentencia.