Juan Pedro Borrego

Triunfo por la mínima ante el colista pero celebrado como una victoria de Euroliga. Así fue el resultado del Herblife Gran Canaria - Sevilla (71-70). Los amarillos sufrieron hasta el bocinazo final. Fue un partido inesperadamente igualado, en el que los sevillanos abusaron de centímetros y el Granca echó en falta más acierto desde el perímetro para conducirlo con suavidad. Pero irónicamente, desde el triple, de la mano de Kuric, encontró la suerte de su victoria en los últimos instantes; y de la actuación del gigante caboverdiano Eddy Tavares, la manera de evitar la sorpresa sevillana, cuando bloqueó el intento de Byars por anotar la canasta de la victoria.

El colista puso en apuros al Herbalife durante todo el partido. Con un bloque que jugaba compacto, las necesidades de los hombres de Scott Roth (Audie Norris le presta su carnet) eran un martillo pilón con una marcha más regular que la de los isleños. A la baja de Summers, otra vez sentado en una esquina y vestido de paisano, se le unió la rápida acumulación de faltas que sufrió Eddy Tavares.

Con apenas unos pocos triples, y sin anotar más que una canasta de dos puntos en el segundo cuarto, abrumados por los muchos centímetros del Sevilla en la pintura, el Gran Canaria se vio acorralado antes del descanso, con una desventaja que llegó a ser de nueve puntos (30-39) y despertaba los primeros desaires desde las gradas.

No había encontrado el Gran Canaria la forma de reducir al colista, y lo intentó tras el descanso con muchas variaciones en su dibujo por parte de Aíto. Se paró así la sangría, pero el Herbalife necesitaba una marcha más para tomar las riendas de un electrónico que había dominado en los dos parciales, aunque por menos de lo que lo hizo el Sevilla en el segundo cuarto para valerle la victoria momentánea antes de llegar al último cuarto (52-56).

En ese momento, Reneses colocó lo que se podía entender como más beneficioso para el equipo. Kendall y Tavares dentro debían responder a las torres visitantes, y bajo la batuta de Bellas, Urtasun y Newley, cortocircuitar el partido. Sólo la cuarta de Tavares rompió el plan, aunque con Báez, el Gran Canaria cuenta con una garantía notable. Las intenciones amarillas eran nobles, defender hasta la extenuación, y correr para anotar. Pero cuando estuvo cerca del éxito en cada acción llegaba un error inesperado, un bote al pie, un pase mal dado, una pérdida por un pase fatal o un triple fuera de guión de los visitantes.

Así parecía que el Sevilla se llevaría la cuarta victoria de sus últimas cinco visitas a Gran Canaria. A un minuto y 16 segundos para el final, el Gran Canaria volvía a ponerse por delante en el marcador por primera vez (68-67) desde que se viera a remolque en el ecuador del segundo cuarto. Desde entonces la histeria se adueño del choque. Berní martilleó desde el triple (68-70); el Gran Canaria perdió otra posesión que Tavares arregló con un gran tapón a Hernangómez para que Kuric firmara un triple extraordinario (71-70). Quedaban 10 segundos de juego para que el Sevilla evitara perder. Porzingis erró desde un lado a seis décimas del final y el saque desde el lateral se convertía en un auténtico córner futbolero para los andaluces con solución festiva para el Herbalife.

Ficha del partido

71 Herbalife Gran Canaria (20+13+19+19): Oliver (8), Kuric (9), Newley (9), Baez (4), Tavares (12) -equipo inicial-, Urtasun (3), Bellas (18), Kendall (6), Paulí y O'Leary (2).

70 CB Sevilla (18+21+17+14): Woodside (6), Alex Urtasun (2), Byars (8), Oriola (9), Hernangómez (14) -equipo inicial-, Radicevic (2), Porzingis (13), Balvin (4) y Rodríguez (12).

Árbitros: José Antonio Martín Bertrán, Miguel Ángel Pérez y Martín Caballero.

Incidencias: 15ª jornada de la Liga Endesa. Pabellón, Gran Canaria Arena.