M.B.

La UD Las Palmas afronta este domingo uno de los partidos más comprometidos de las últimas temporadas, ante un rival que ha estado notable y una afición del Sporting de Gijón que cubrirá los asientos del Molinón en mayor número posible en lo que va de campeonato. Así lo ha anunciado. Porque hay mucho en juego; los tres puntos, las ubicaciones en la clasificación y el probable devenir de acontecimientos.

Esta situación no es extraña para los jugadores de Paco Herrera, que han defendido a gran altura momentos cumbres de las dos anteriores ligas, de forma especial, cuando aspiró a llegar a la Primera División vía promoción de ascenso. Los amarillos lograron victorias y resultados de alto rango en feudos de rivales directos, hecho que ahora -con la condición de líder en la tabla- también se requiere. Recordemos algunos episodios recientes:

2012-13

Quizá una de las victorias más importantes de aquel ejercicio fue la lograda en la fase regular, en el Estadio de los Juegos del Mediterráneo. El 2-3 al Almería llevó la firma de Jeison Murillo, autor de dos tantos y uno de ellos en el minuto 89. Chrisantus completó una jornada donde Las Palmas creció mucho. De nuevo se enfrentó en la vuelta de la promoción a los andaluces y Maky, con otro gol in extremis, provocó un empate 1-1 y luego prórroga, que finalmente se decantó para los rojiblancos.

Las Palmas aguantó en aquel escenario el tirón adversario. También lo había hecho en feudos tan cualificados como el Madrigal y el Molinón, con empates 1-1. Murillo, otra vez, fue el que equilibró el partido frente al Villarreal, que se había adelantado a través de Perbet. Y Vitolo Machín, con una galopada sensacional desde campo propio, puso la esperanza contra el Sporting, que pudo recortar más tarde con el gol de David Rodríguez.

Otro triunfo crucial esa temporada fue el 0-1 en Ponferrada, con dos equipos jugándose la promoción. Thievy, en el 90, derrumbó las aspiraciones de la Ponferradina con el 0-1 que llevaría a la UD a disputar la fase de ascenso.

En ese ejercicio, en cambio, la UD falló en sus visitas al Elche (3-1), Girona (5-0) y Alcorcón (3-1) tres de los conjuntos que estuvieron involucrados en la lucha por el ascenso

2013-14

Durante la pasada campaña también se vivieron grandes emociones en algunas visitas subrayadas de la UD Las Palmas. Con el estadio de Riazor abarrotado, los amarillos vencieron 1-2 apelando a la realización de Nauzet Alemán y Vicente Gómez en un partido con remontada canaria. Ese golpe de autoridad no fue el único. Con los mismos realizadores también lo dio en el Miniestadio, ante el Barcelona B 1-2, cuando el filial azulgrana era uno de los clubes pujantes en la categoría acabando en tercera posición general.

Momo, Aranda y Nauzet fueron los goleadores del 1-3 que enfrió la Condomina frente al Murcia y Tana hizo lo propio en la liga regular, durante la visita al Córdoba. La vuelta en el Arcángel fue diferente, entonces en fase de promoción. Allí Las Palmas aguantó el ambiente y arrancaba un esperanzador empate sin goles, previo al encuentro del 22 de junio.

Otro de los triunfos más importantes del pasado ejercicio volvió a llevar la firma de Vicente Gómez, con sus dos goles en la Romareda de Zaragoza (1-2). Y fueron especialmente notables las dos victorias en la pasada campaña como visitantes en el Molinón. En la fase regular se produjo un emocionante 2-3, un toma y daca resuelto con el hat trick de Macauley Chrisantus. En la promoción de ascenso, la incertidumbre la certificó Asdrúbal en los instantes finales, para el 0-1.

El único lugar en las alturas de la pasada Liga fue el 1-0, obra de Yuri, del paso amarillo por Ipurúa. Entonces se desconocía la ruta final que iba a llevar al Eibar a la Primera División.

Este domingo, en El Molinón, se espera un gran encuentro porque hay mucho en juego. La UD ya ha mostrado que puede competir al máximo nivel como visitante. Lo hizo en Girona 1-2, Valladolid 1-2, Sevilla contra el Betis 0-0, también en Mallorca 1-1 o Ponferradina 2-2, que andan merodeando la zona de promoción. En la visita al Sporting, con una hinchada pasional y tres puntos de alta carga, la afición grancanaria espera volver a ver a un verdadero líder.