M. B.

"Lo vamos a conseguir; pero el horizonte del equipo no es otro que Leoia. Les he dicho a los jugadores que este es el único panorama. No existe otra cosa que el partido del domingo". Ese es el kilómetro cero de una remontada, la que pretende el tercer equipo del Archipiélago de Canarias, Las Palmas Atlético, tras el relevo técnico realizado a comienzos de semana. Quien habla para Tinta Amarilla es el nuevo entrenador del primer filial, Mingo Oramas, sobre quien ha recaído la responsabilidad del rescate de un posible descenso a Tercera División. "Encontré en los primeros días un escenario de conocimiento mutuo, aunque la mayoría de los jugadores ya han estado conmigo en el juvenil. Salvo los tinerfeños, que fueron nuestros rivales, o en el caso de Maykel, Enrique Castaño y Braulio, a todos los conocía de antes. Nos hemos mirado estos días y, ese primer momento, todos sabemos lo que pensamos. A partir de ahí, se ha producido el diálogo con todos los jugadores a nivel individual. Porque yo entiendo", prosigue, "que estamos en un proceso de aprendizaje, que el primer filial está más cerca de la base que del primer equipo".

La distancia hasta la salvación pasa por un par de conceptos a rectificar. "Lo que les he pedido a los jugadores en primer lugar es orden y disciplina en el terreno de juego. La ambición vendrá por querer y creer en lo que estamos haciendo. Luego pretenderemos no estar tan encorsetados a nivel ofensivo. Pero ya plantearemos nuestro juego de ataque una vez cortemos la hemorragia de goles en contra. Eso es clave y es lo que nos permitirá salir adelante".

"Todo el calendario que tengo en la cabeza es Leioa. Si me preguntan el rival de Las Palmas Atlético dentro de tres semanas ... ni lo sé. No me interesa otra cosa que Leioa. De nada sirve pensar en lo demás si no somos capaces de saber qué haremos en el primer encuentro. Queremos que los jugadores también se ocupen en exclusivo de Leioa, nada más", insiste tras concluir este jueves la tercera sesión de trabajo bajo su mando.

Habla también del estado anímico de los jugadores: "Me he encontrado a un grupo que va de menos a más durante la semana. A medida que avanzan los días las sensaciones que me transmiten son más positivas, encontrándose a sí mismos. Es poco tiempo una semana pero confío en llegar al partido con el Leioa en las mejores condiciones".

Algún cambio táctico

Leioa es "un rival que aprieta muchísimo en el centro del campo. Su campo es amplio pero en mal estado. Tendremos poco tiempo para adaptarnos". Habrá novedades pero sustanciales en el primer once de la era Oramas: "En el aspecto táctico sí cambiaré alguna cosa, porque cada entrenador tiene manera propia de ver el fútbol. Hay situaciones del juego que igual no corresponderá con mi antecesor, pero no estamos descubriendo el fútbol. La idea", prosigue, "es estar más arropados, más juntos. Pero hay que trabajarlo porque las pautas del juego de ataque partirán de nuestro orden defensivo".

"Para mí Las Palmas Atlético está más cerca de la base que del primer equipo. Lo tengo siempre claro. Son futbolistas en formación que juegan en una competición que es profesional, ante rivales profesionales. Pero incluso el primer equipo también tiene sus piezas en formación, porque siempre el deportista ha de estar formándose y mejorando su juego. Las Palmas Atlético compite en Segunda B, con sus días buenos y malos, pero nos queda sólo la Segunda B y sacar puntos", afirma convencido.

El juego de pillerías

No quiere dejar cabos sueltos. En las últimas semanas los gestos teatrales rivales han provocado un déficit deportivo para los amarillos. El caso de Artiles es el más reciente. "Hemos hablado de ello (la pillería de los jugadores adversario). Les tenemos que pedir a nuestros futbolistas que sean más listos, que se dan en el campo situaciones de marrullería que nos pueden perjudicar. Hay que estar mentalizados para ello, en una categoría donde existe mucha veteranía en jugadores de plantillas contrarias. Esto tiene que salir y debe hacerlo esta misma semana. El equipo tiene ilusión y ganas para resolver este tipo de momentos".

Su marcha del División de Honor, por último, no crea un vacío sino una continuidad porque, en su caso, "llevo mucho tiempo preparado para este momento. Esa oportunidad me ha llegado ahora, por circunstancias del fútbol. Intentaré no fallarle al club en esta misión. Pachi Castellano está preparadísimo para asumir el mando del juvenil. Espero que mejore lo que nosotros hemos realizado. Es muy serio y está en condiciones para llevar a un conjunto de las características".