Manuel Borrego

Araujo golpeó la madera en dos ocasiones con el marcador intacto; Jorge Molina las enchufó dos veces en sus primeras oportunidades del segundo tiempo. Las Palmas perdió un partido clave, pero que no es definitivo. El 0-3 del Betis saca a los amarillos del liderato y de las plazas de ascenso directo a Primera División. Pero no acaba aquí el campeonato en este encuentro que se le fue de las manos al equipo de Paco Herrera en quince minutos de la segunda parte, en los que el Betis anotó sus tres tantos: dos de Molina y uno tercero de Ceballos. El golpe anímico fue determinante en el tramo final y rescata para la UD Las Palmas un momento de reflexión de cara a las últimas secuencias de una Liga, en que el extravío de estos puntos no suponen la desaparición de la candidatura grancanaria, que se mantiene en pie.

La primera parte ya fue extraordinaria. Paco Herrera y Mel pusieron sus cartas boca arriba. Las Palmas asumió pronto el mando en las operaciones; el Betis optó por esperar, agazapado, imitando las contras que una semana antes brindó el Sporting de Gijón en el Molinón. Los amarillos metieron pases y pases, buscando la fisura en la muralla verdiblanca, ese gol que le abriera la mañana luminosa en el Estadio de Gran Canaria.

El primer momento fue amarillo

El partido de líderes fue un ida y vuelta durante una hora, frenético, sin descanso ni tregua, con un nivel arbitral que permitía, además, el contacto en abundancia. Las Palmas metió gas a sus acciones aunque fue su rival el primero que pudo adelantarse en el marcador, con un disparo desde la distancia de Pacheco. El balón volaba ajustado hacia la portería grancanaria y Casto evitaba el tanto con un manotazo, a corner.

A la derecha, el remate de tacón de Vicente al que respondió con una felina parada Adán (C. Torres)

Ese fue el primer y único susto de la fase iinicial, porque todo lo demás lo fabricó Las Palmas. Las sociedades en ataque del trío Momo-Nauzet-Araujo, sumado a las sorpresivas apariciones de Vicente fue un quebradero de cabeza para el Betis. El zurdo pudo marcar en dos ocasiones, en especial con un desvío tras corner que Adán salvó. Las dos oportunidades siguientes fueron de Aythami y Araujo, con disparos al larguero -continuidad de aquella parada de Adán- y al poste respectivamente, este último tras acción personal. Pero el gol se negaba a acompañar el juego de los amarillos, que entonces era más entero que el de su oponente.

Quince minutos de caos

Las Palmas había perdonado, pero no lo hizo el Betis. Porque en una fase prolongada de aparente tregua, Jorge Molina se encargó de dinamitar la mañana. Fue el hombre la sentencia porque el primer gol del delantero verdiblanco encontró una mandíbula de cristal dentro y fuera del campo. Molina encontró un filón en las dos primeras ocasiones del segundo tiempo. La primera herida llegó tras un rebote cazado por Portillo, que dejó en solitario a su compañero ante Casto. Sin asimilar el primer golpe, el segundo, desde la frontal. Y en la tercera ocasión el Betis hizo pleno por mediación de Ceballos, en otro mano a mano ante el portero canario, en pleno desconcierto amarillo.

Esos quince minutos aciagos de Las Palmas, desorientada y golpeada en su moral, fueron un mazazo que provocó, además, la salida de manera de muchos aficionados que no quisieron presenciar los minutos finales. El 0-3 fue incontestable desde entonces, es una derrota dura pero no un 22J. Hay más Liga y más puntos en juego.

Alineaciones:

UD Las Palmas: Casto, David Simón, David García, Aythami Artiles, Angel López, Javi Castellano, Hernán (Valerón, 79), Vicente (Guzmán, 67), Nauzet (Ortuño, 67), Momo y Araujo

Betis:Adán, Molinero (Cejudo, 79), Bruno, Figueras, Varela, Lolo Reyes (Torres, 69), N'Diaye, Portillo, Pacheco (Ceballos, 61), Jorge Molina y Rubén Castro

Goles. 0-1, m. 61. Jorge Molina, desde el borde del área.  0-2, m. 73. Jorge Molina, de nuevo, con un chut junto al poste desde la frontal. 0-3, m. 76. Ceballos, tras un pase profundo

Arbitro. Pedro Sureda Cuenca (Balear). Mostró tarjetas amarillas a Aythami y Hernán (Las Palmas), Torres y Varela (Betis).

Pormenores. 21.123 personas en el Estadio de Gran Canaria para el encuentro de la 29 jornada de Liga, en la que la UD Las Palmas y el Betis llegaban a la par con 53 puntos. Se guardó cinco segundos de silencio (por decisión de Sureda) en memoria de Antonio Betancort. En el descanso se rindió un homenaje al Rocasa de balonmano, campeonas de la Copa de la Reina de balonmano. La afición que se quedó en el Gran Canaria ovacionaron a los jugadores grancanarios, en señal de ánimo tras la cuarta derrota de la temporada, la más abultada.