B.P.

En la noche en que un segundo equipo turco pisaba el Gran Canaria Arena en el estreno continental de la instalación, un hecho curioso quedó registrado entre las imágenes del partido. Una ikurriña estaba situada, durante todo el encuentro tras el banquillo del Pinar Karsiyaka, custodiada por varias personas. Esa bandera tenía incrustado un escudo del club otomano y casi es un símbolo de veneración para la expedición deportiva del club que se cruza al Gran Canaria en los cuartos de final de la Eurocup.

La relación del Pinar Karsiyaka con el País Vasco tiene una explicación que, en su día, se hizo eco el propio Athletic Club de Bilbao. La coincidencia de colores entre la bandera de la Comunidad Vasca y los del club turco fue captada en 1996 por un hincha del Karsiyaka que, por motivos laborales, se instaló en Bilbao durante aquellos años. La noticia de la relación de colores la llevó a la cálida afición del Pinar, que no tuvieron problemas en enlazar el escudo del club con la bandera de los vascos.

Una representación de esa bulliciosa afición, que esperará al Gran Canaria en número masivo para el encuentro de vuelta, estuvo presente en el Arena. Su número reducido a varias decenas no les impidió hacerse escuchar en diversas fases del encuetro y, cómo no, entre sus símbolos ... la ikurriña. "Karsiyaka Everywher" reza su cartel de decoración con los colores verdes, rojos y blancos entremezclados.

Los diez puntos de renta logrado por el Gran Canaria (76-66) multiplicarán en Izmir el colorido del equipo turco; más iturriñas, sin duda.

Fotos: C. Torres