La plantilla muestra su optimismo de cara a la gran final de la Liga del domingo, con un mensaje que llevarán a todas horas antes del partido y en apoyo a "Desirée", en busca de una prótesis para su pierna (explica el club)
B.P.
La plantilla de la UD Las Palmas se lleva un mensaje a casa: "Prohibido rendirse". Así reza la pulsera que la mayoría de los jugadores exhibieron al término del entrenamiento de este viernes, penúltima sesión de la temporada. Los futbolistas de Paco Herrera llevarán esta misiva hasta el momento del encuentro, a partir de las 18.00 horas del domingo.
Los rostros de los jugadores delataban este día el alivio al sentirse arropados por una multitud. El propio Paco Herrera y su asistente Ángel López también lleva en su muñeca esta misiva, que ha de convertirse en el desayuno, almuerzo y cena de toda Gran Canaria. El regreso a la Primera División está a un partido y la batalla promete ser completa.
Esta iniciativa, además, explica el club lo siguiente: "Apoyamos a Desirée para conseguir su objetivo: una prótesis para su pierna".
Galería: C. Torres
