M.B.

La campaña de abonados de la UD Las Palmas mantiene una trayectoria récord, al cubrir la segunda semana (14 jornadas) desde su inicio, si bien la primera de ellas comenzó a las cinco de la tarde. La animación del aficionado por acompañar al equipo de Paco Herrera en Primera División no cesa y sobrevive a cualquier debate o polémica.

Los datos son concluyentes y merece relacionarlos con otros propios. Al cierre de este jueves, 9.257 nuevos carnets o renovados se han tramitado en la oficina del Abonado o en las otras dependencias y servicios que ha puesto el club a disposición de la campaña Vivelo. Esa cantidad es prácticamente similar a la totalidad de lo realizado en el ejercicio 2012-13 (9.602 asientos ocupados), perteneciente al primer ciclo de dos temporadas de Lobera y con la promoción como destino. Y se sitúa en dos tercios del camino de la totalidad del pasado año (15.000).

Tras dos semanas, la campaña de 2015-16 mejora en un 45,1% más lo realizado en esa misma cantidad de días hace doce meses. Es decir: de los 6.379 carnets de 2014-15 se ha pasado a los 9.257, con el adicional incremento económico con el paso a la Primera División.

El final de la promoción de abonados puede estar todavía a cinco semanas o seis semanas vistas, con el inicio de la competición como fondo y aún sin conocer el resultado del calendario que, a buen seguro, todavía animaría más la decisión de los aficionados.

La trayectoria es de récord aunque, paralelo a ello, también hay reflejo de disgusto en sectores de aficionados. 20.000 es el listón máximo previsto, que se convirtiría en la nueva referencia histórica del club en Primera División.