Gustavo Pérez, conocido deportivamente como Gus, saborea la victoria en su estreno con el Gran Canaria FS. El guardameta, que llegó este verano al club grancanario procedente del Zamora, afirma haberse sentido muy cómodo en el plano personal, pero sobre todo valora haber conseguido empezar con un triunfo el campeonato liguero en un choque complicado frente a un rival muy fuerte, el Hércules San Vicente.

"Lo importante es que sacó adelante el partido con mucha lucha y sacrificio por parte de todos. Creo que merecimos ganar. Dimos la talla a pesar de llevar menos tiempo de preparación que nuestro rival y de no habernos enfrentado a adversarios de nuestra categoría o superior en pretemporada, como ellos. Estos tres puntos nos motiva a seguir trabajando en la misma línea", explicó el cancerbero amarillo.

Gus destaca la pasión con que se vivió el partido que abría la Liga, que en algunas fases del mismo parecía de final de temporada: "Se trata de choques de alto nivel de exigencia, intenso, bonito, duro... Creo que habrá muchos enfrentamientos parecidos a éste durante el año. Sin ir más lejos, el próximo, fuera contra el Cartagena, vaticino que será parecido, porque nos medimos ante un rival que está llamado, como nosotros, a pelear en la zona alta de la clasificación".

Y es que Gus tiene claro que el ascenso a Primera División es la meta deseada por todos en este curso. "El objetivo es subir, pero soy de los que creo en la filosofía de ir partido a partido", explica. El portero del Gran Canaria FS cree que hay mimbres suficientes para afrontar el reto, "pues contamos con una plantilla muy compensada".

"En todas las posiciones, el equipo tiene jugadores de nivel para rendir con garantías cuando se necesite; y también en la portería. Estamos preparados para que, cuando lleguen adversidades como lesiones o sanciones, el entrenador pueda confiar en otro compañero sin que eso se note en el rendimiento del conjunto. Esto aumenta la competitividad y hace que nadie se relaje o baje la guardia en los entrenamientos", explicó el portero amarillo.