B.P.

Ingenio ante la adversidad. Quique Setiény su asistente Eder Sarabia sacaron punta para extraer rendimiento a los jugadores utilizados este jueves frente a la Real Sociedad. No sólo por el juego, sino por la polivalencia de algunas de las piezas, que tuvieron que someterse a una exigencia extra.

De entrada, con los problemas habidos en la zona de retaguardia, Nili Perdomo ocupó el lateral derecho mientras Dani Castellano lo hacía en el izquierdo. Garrido se readaptó a central acompañando hasta que Pedro Bigas se lesionó. La primera decisión que adoptó fue retrasar a Hernán Santana a la posición de retaguardia e introducir a Vicente Gómez en su posición natural. Pero ésta no fue definitiva.

Con el paso de los minutos y el desgaste de las piezas, el equipo se transformó para mantener el tipo en los instantes finales, con movimientos de piezas sobre una misma idea de juego. El Zhar acabó como lateral, mientras Vicente se acopló a Hernán para formar una insólita pareja de centrales.

Roque y Culio acabaron asociados en el centro del campo, en la zona de trabajo, donde Valerón apareció para completar noventa minutos de talento y batalla.

Asdrúbal volvió a recuperar la banda, como hacía en etapas en el filial. Y Willian José fue una certera punta de lanza que incordió los noventa minutos.

El partido deja la victoria y, lamentablemente, un lesionado. Pero también muchos jugadores alzando el brazo reclamando una nueva oportunidad.